Así fueron las 48 horas del Rey Felipe esquiando en la nieve
El Rey Felipe ha pasado un fin de semana de lo más intenso en la nieve.

El Rey Felipe ha pasado un fin de semana de lo más intenso, como ya te contamos en SEMANA. Sin embargo, unos días después de que saltara la noticia, conocemos más detalles de este viaje en solitario de Felipe, que ha estado acompañado de amigos, y no de Letizia y sus hijas, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía. Hay que recordar que estuvo junto a ellas en el mes de febrero de 2017.

Felipe llegó el pasado viernes a la estación de Formigal en el Pirineo francés, y se instaló en el hotel Abba Formigal, donde cuesta alrededor de 220 euros la noche, tal y como publica LOC. Se trata de un cuatro estrellas que cuenta con todas las comodidades, además de estar a pocos metros de la pista de esquí, donde el Rey ha practicado uno de sus deportes favoritos. 

Según publica este mismo medio, los empleados del hotel no sabían nada de la llegada de Felipe. Y es que la Casa Real nunca utiliza el nombre de los monarcas para reservar en los distintos hoteles que frecuentan cuando salen fuera.

Así fueron las 48 horas del Rey Felipe esquiando en la nieve
El Rey no ha estado acompañado por Letizia ni sus hijas, con las que estuvo en febrero de 2017.

El sábado, nada más levantarse, acudió al comedor del hotel para disfrutar de un buen desayuno, esencial para coger energía antes de una jornada de esquí. Allí, no quiso esconderse y estuvo haciéndose fotos y hablando con los clientes del hotel, a los que llamó mucho la atención la presencia del Rey.

A las 10 de la mañna ya estaba sentado en el telesilla junto a Antonio Gericó, director de Aramon, que es la empresa que lleva esta estación de esquí, y Eduardo Roldán, ex director de Candanchú.

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Después de una larga jornada de esquí, el Rey Felipe disfrutó de una merecida comida en la cabaña La Glera, ubicada a 2.000 metros de altura. Se encuentra en el valle de Portalet, en la pista “Pipos” desde dónde podéis disfrutar de unas impresionantes vistas del valle de Tena. La única forma de acceder a la zona es mediante una Ratrack, es decir, una máquina pisanieves. Para la cena, Felipe y sus amigos decidieron acudir al asador Borrullán, de comida casera.

Así fueron las 48 horas del Rey Felipe esquiando en la nieve
Esta es una de las vistas de el restaurante La Glera por la noche.

Ha sido un fin de semana de lo más aprovechado, donde Felipe no ha tenido reparos a la hora de coincidir con la gente en el hotel ni tampoco en las pistas de esquí. De hecho, Felipe ha tenido un lunes muy intenso, ya que se ha tenido que ocupar de unas audiencias en el Palacio de la Zarzuela.

¿Le acompañarán en el siguiente viaje Letizia y sus hijas?