Alma Cortés Bollo ha hecho saltar las alarmas, en los últimos días, por su estado de salud. La hija de Raquel Bollo lleva meses arrastrando problemas que le han llevado a acudir al hospital en múltiples ocasiones hasta ser diagnosticada de neuralgia. Pero sus quebraderos de cabeza no quedaron ahí, y el pasado miércoles, 25 de junio, tuvo que regresar a urgencias de nuevo, desde donde dio la última hora sobre cómo se encontraba.

Storie de Alma Cortés Bollo

Storie de Alma Cortés Bollo.

@almacbcortes Instagram

Preocupación por el estado de salud de Alma Cortés Bollo: "No puedo más, creo que mi cuerpo ha mandado muchas señales"

En un extenso comunicado, Alma aseguró que su cuerpo “ya me ha mandado muchas señales y está petando”, pues ha estado realmente estresada por tener que adaptarse a su nueva vida con dos niños, y “lejos de mi chico”. Ahora, y después de mantener a sus seguidores en vilo, la joven ha arrojado nueva información sobre su estado de salud: “Amores me paso por aquí a daros alguna referencia acerca de mi persona y mi estado. Voy evolucionando, muy poco a poco, sigue habiendo dolor pero soportable, que no quiere decir que sea light pero, al menos, lo puedo sobrellevar”, ha comenzado, en un intento por calmar los ánimos de las personas que no pierden detalle a sus movimientos.

Por supuesto estoy ‘empastillada’ hasta las manillas y la mayoría de medicamentos que tengo me causan mucho sueño pero… Vamos avanzando. Por cierto, no os quiero ni contar el gran hinchazón que tiene mi cuerpo por culpa del corticoide… Qué locura lo que hace eso en tu cuerpo eh”, ha zanjado, dejando entrever que los medicamentos que le recomendaron los profesionales pertinentes están haciendo mella en su día a día. Pero aun así, está contenta de que sus problemas vayan a finalizar, para comenzar una nueva etapa, al menos, con un mejor estado de salud.

Alma Cortés Bollo hace saltar las alarmas desde el hospital

Alma Cortés Bollo hace saltar las alarmas desde el hospital. 

Redes sociales

Cabe destacar que estas palabras tranquilizadoras nada tienen que ver con las que escribía en su comunicado hace unos días: “De verdad que hay veces que siento que no puedo más. Creo que mi cuerpo ya me ha mandado muchas señales y está petando por completo. Llevo nueve meses insufribles donde obviamente todo el estrés de mi vida es el principal culpable de todo, o al menos eso creo yo”, comenzaba diciendo, revelando así la razón por la que tuvo que acudir de nuevo al hospital.

El comunicado más sincero de la hija de Raquel Bollo: "Llevo nueve meses insufribles donde el estrés es el principal culpable de todo"

“Cambio radical de vida, irme de mi ciudad, la nueva casa con su correspondiente obra, que ya sabéis todo el estrés que ocasiona, una búsqueda exhaustiva y bastante nefasta de colegios para Jimena, eso me ha traído por la calle de la amargura… Aunque el viernes por fin se solucionó”, continuaba, recordando que, pese al estrés, por suerte logró uno de sus principales objetivos tras una mudanza repleta de altibajos. 

Por su parte, Alma también hacía hincapié en lo complejos que habían sido los últimos meses para ella: “Adaptarme a la nueva vida con dos niños, que no ha sido nada fácil, ya que me tocó sola, lejos de mi chico, y con un bebé nada bueno… Enganchado completamente al pecho, con una mamitis horrenda, meses y meses de noches sin descanso y teniendo que estar estupenda para afrontar el siguiente día y darles lo mejor de mí”, ha contado con cierto agobio. A lo que se suma su trabajo como creadora de contenido y empresaria: “Mi trabajo en redes sociales, que gracias a dios no me falta nunca y mi propio negocio, que necesitan de mucho tiempo y dedicación y a eso sumarle los viajes a otra ciudad para poder trabajar”, confesaba, compartiendo con sus seguidores el momento profesional en el que se encuentra para que, así, puedan saber cómo se siente.

A todo esto se suma el hecho de llevar nueve meses viviendo entre tres ciudades: Sevilla, Madrid y Algeciras: “Todo el estrés que eso supone encima siendo mamá! Y a eso hay que añadirle el hacer maletas finde sí y finde también para poder ir a ver a mi chico y al menos vernos dos días. Nueve meses donde he pisado más el hospital que mi propia casa. No solo para entrar y salir a una urgencia, sino para quedarme ingresada en un par de ocasiones. El último ingreso me provocó mucho malestar y culpabilidad, ya que debido a todos los medicamentos tan fuertísimos que tuvieron que poner para parar mi infección y la neuralgia que me diagnosticaron, me provocó el corte de la producción de leche materna, por lo que me vi obligada a un destete sin yo creer que era el momento de hacerlo”, señalaba con cierto dolor.

 

Por último, la hija de Raquel Bollo zanjaba su mensaje con contundencia: “Podría seguir escribiendo mil cosas más, pero la conclusión es: ¡QUE NO PUEDO MÁS! Necesito estar bien, necesito volver a ser yo sin tener que estar medicada semana sí, semana no… Y sobre todo estar bien por mí, por mis niños y por las personas que me rodean día a día!”.