La doctora Beatriz Beltrán, sobre los retoques estéticos de Marta Sánchez: “Hay una sutil diferencia en el puente nasal, que podría ser resultado de una rinoplastia o modelación con ácido hialurónico"

Con más de tres décadas brillando sobre los escenarios, la cantante Marta Sánchez es una de esas figuras que siempre tenemos presentes en el imaginario español, siendo un auténtico icono de estilo. Siempre ha presumido de un estilo sofisticado y cuidado, que ha ido evolucionado con el paso del tiempo, adaptándose a nuevas tendencias sin perder su esencia.

Esta transformación no solo hace referencia a sus looks, sino que ha estado también acompañada por sutiles intervenciones estéticas que han potenciado su belleza sin distorsionar sus rasgos. Marta, que nunca ha escondido su afinidad por los avances en medicina estética, representa a una generación de mujeres que entienden las ventajas de unos retoques bien hechos. La clave de su éxito ha sido apostar por técnicas mínimamente invasivas que suavizan el paso del tiempo sin borrar la expresión.

Ácido hialurónico: el volumen estratégico que rejuvenece sin delatarse

Uno de los tratamientos más frecuentes y que, con toda probabilidad se ha realizado la cantante, es el uso de rellenos con ácido hialurónico. Este componente tiene la capacidad de restaurar el volumen perdido en áreas como los pómulos, el surco nasogeniano o incluso el mentón, logrando un rostro más armónico, firme y juvenil.

En su caso, y tal y como nos cuenta la Dra. Beatriz Beltrán, especialista en medicina interna, medicina estética y nutrición, y fundadora de la Clínica Dra. Beatriz Beltrán en Paseo de Gracia en Barcelona, “se ha realizado rellenos en la zona media e inferior del rostro. En las mejillas (malar y submalar) vemos una mayor proyección y volumen en el rostro adulto, probablemente para contrarrestar la pérdida de volumen natural. En cuanto a los surcos nasogenianos y líneas de marioneta, se aprecia una notable suavización de estas líneas, típica del uso de rellenos dérmicos”.

Esto deja como resultado una mejora general de la estructura facial, con contornos más definidos, pero sin signos de exageración. “Eso sí, llevo 20 años en esto y con rellenos no se soluciona todo. Lo ideal es combinar los inyectables de ácido hialurónico con aparatología para corregir la flacidez sin sobrerrellenar ni hinchar. Hay que saber dónde están los límites, saber decir que no, combinando y gestionando las expectativas del paciente. Esa es la clave del éxito”, afirma la experta.

En cuanto a los labios, es otro de los detalles que ha llamado la atención de los expertos en medicina estética. “Estos presentan mayor volumen y definición, especialmente en el arco de cupido, algo que no era evidente en su juventud, algo que se logra también con ácido hialurónico”, añade la doctora.

Toxina botulínica: el secreto mejor guardado para una mirada sin fatiga

La toxina botulínica, conocida popularmente como bótox, es otro de los aliados que muy probablemente forman parte del ritual de belleza de Marta Sánchez. Es uno de los retoques más conocidos desde hace décadas que, utilizado con inteligencia, permite relajar la musculatura facial y disimular las líneas de expresión. En el caso de Marta, su mirada se mantiene abierta, descansada y libre de signos de fatiga, un claro indicio de un tratamiento eficaz y medido.

“Frente lisa, sin patas de gallo y sin arrugas dinámicas visibles, lo que indica el uso de toxina botulínica para prevenir y tratar líneas de expresión”, comenta la especialista. Los resultados suelen durar entre 4 y 6 meses y no requiere cirugía ni tiempo de recuperación. Lo fundamental es no pasarse, para evitar esa sensación de rostro congelado.

¿Minilifting facial? La firmeza que resiste al paso del tiempo

Aunque esto nunca se ha confirmado por su parte, es cierto que algunos expertos coinciden en que Marta podría haberse realizado un lifting facial. Esta cirugía busca tensar la piel del rostro, reposicionando los tejidos faciales, especialmente en la zona del óvalo mandibular y el cuello, aportando una definición rejuvenecedora y duradera.

“Un posible lifting quirúrgico (ritidectomía). La piel luce más tersa, especialmente en la línea mandibular, que está más definida, lo cual suele ser un indicativo de intervención quirúrgica o técnicas como el lifting cervicofacial”, declara la doctora. Lo destacable de este tipo de cirugías es que, si se realizan con criterio estético y manos expertas, los resultados no son artificiales ni exagerados. Prueba de ello es la cantante, que conserva la suavidad de sus líneas, pero con una firmeza que contradice el paso de los años.

Rinoplastia y blefaroplastia: la clave de una belleza armónica

Otros posibles retoques que se han destacado en la imagen de Marta Sánchez, son dos de los que poco a poco ganan más popularidad entre las celebrities: la rinoplastia y la blefaroplastia. “Hay una sutil diferencia en el puente nasal, que podría ser resultado de una rinoplastia o modelación con ácido hialurónico”, comenta. Eso sí, es un cambio muy sutil, que encaja de forma natural con el resto de sus facciones.

Por otro lado, la zona de los ojos ha sido siempre uno de los sellos distintivos de su rostro. A lo largo de los años, su mirada ha conservado una vitalidad luminosa y fresca que podría ser el resultado de una blefaroplastia superior e inferior, un procedimiento que elimina el exceso de piel en los párpados caídos y reduce las bolsas de grasa. “• Se observa una mirada más abierta, sin exceso de piel en el párpado superior ni bolsas marcadas en el inferior, lo que es compatible con una blefaroplastia”, continua.

“Una alternativa a la blefaroplastia sin cirugía sería realizar el tratamiento con radiofrecuencia monopolar Thermage, específica para ojos combinado con Fotona, que incorpora láser de neodimio y erbio para lograr la mejoría de las bolsas, las arrugas y el tensado de párpados inferior y superior. La mirada se eleva y relaja. Para prevenir y corregir la zona de los ojos se puede realizar 1 sesión 1 vez año”, remata la experta.

Cuidados complementarios y tratamientos regenerativos

Otra forma de presumir de un rostro impecable, son los tratamientos complementarios que mejoran la salud de la piel desde dentro. Estos no solo previenen el envejecimiento prematuro, sino que también potencian el efecto de los retoques estéticos, haciendo que los resultados sean más duraderos y armoniosos. “La textura y el brillo de la piel sugieren tratamientos como, luz pulsada intensa (IPL), radiofrecuencia, o peelings químicos”, explica.

Además, Marta apuesta por una cosmética de alto rendimiento, basada en antioxidantes, retinoides, péptidos y protectores solares de amplio espectro. Es evidente que su piel ha sido tratada con mimo y constancia, lejos de soluciones milagrosas o de última hora. “También hablamos de un posible uso de bioestimuladores, como hidroxiapatita cálcica o polinucleótidos, para mejorar la calidad de la piel. La infiltración de estos estimuladores de colágeno revierte el envejecimiento y consigue la recuperación de volúmenes muy natural”, finaliza.

Con todo ello, Marta Sánchez no destaca por un uso indebido de los retoques estéticos, sino que demuestra la capacidad transformadora que tienen si se hacen como es debido. La lección que nos deja, y que todas deberíamos de tener en cuenta, es: la belleza real no está en la juventud eterna, sino en saber cuidarse con criterio, respeto y amor propio.