Selfies, ‘comadreo’ con los vecinos y cero protocolo: lo que no se vio de la visita sorpresa de los Reyes y sus hijas a Chinchón

La localidad madrileña de Chinchón celebra desde el año 1963 la representación popular de la Pasión de Cristo, una fiesta declarada de Interés Turístico Nacional, que este año ha contado entre su público con los Reyes Felipe y Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía. La familia llegó a la localidad al anochecer -alrededor de las 21:45 horas-. Poco antes ya se había corrido la voz entre los vecinos de la noticia. Esta inusual visita de los monarcas por Semana Santa nos deja muchas anécdotas. Te contamos las más destacadas.

La presencia de los Reyes generó un importante revuelo. Los monarcas quisieron vivir la festividad a pie de calle junto al resto de vecinos para ver de cerca este vía crucis representado por más de 250 personas. No faltaron los selfies y las fotos con los lugareños. También una conversación distendida que protagonizó la Reina Letizia con una mujer que se encontraba a su lado siguiendo el vía crucis. Un comadreo, como se dice popularmente, que la mujer de Felipe VI vivió con mucha naturalidad. Y es que mientras seguía con atención la representación, parece que quiso interesarse por algunos entresijos de este vía crucis que congrega cada edición a muchos turistas y que se vive con gran fervor en el pueblo. Este año las calles de Chinchón volvían a estar abarrotadas.

Las indicaciones de la princesa Leonor a su padre

La noche del Sábado Santo dio para mucho. Los Reyes estuvieron alrededor de hora y media en la localidad siguiendo la representación en distintos puntos. Incluso consiguieron perderse entre el público, así que por primera vez y que no sirva de precedente, esquivaron el protocolo para vivir una jornada tan especial que nos deja momentos para el recuerdo. Entre ellos, al rey Felipe captando con su propio móvil algunos instantes del vía crucis. Su hija mayor, la princesa Leonor, protagonizó otra de las anécdotas de la noche dándole algunas indicaciones, incluso sosteniendo su móvil para mejorar el encuadre y captar con precisión el instante. 

Chinchón ha sido escenario de la última reaparición, por sorpresa, de la familia. Otro de los detalles que ha llamado la atención en la gran complicidad que existe entre la princesa Leonor y la infanta Sofía. Ambas se dejaron ver cogidas de la mano, un gesto que confirma lo unidas que están. Por cuarto año consecutivo, la familia de Felipe VI no ha viajado a Mallorca, quien sí lo ha hecho ha sido la reina Sofía que ha cumplido con la tradición acompañada por su hermana, Irene de Grecia. El Jueves Santo, ambas acudían a la procesión del Cristo de la Sang, la más concurrida de la isla.

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