Después de una semana en Tailandia, Rodolfo Sancho volvía este domingo, 10 de septiembre, a Madrid. El actor regresaba a primera hora de la mañana con semblante serio y visiblemente cansado después de muchas horas de viaje acompañado por su abogado, Marcos García Montes. Su llegada ha congregado a un destacado número de reporteros en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas. Ha evitado hacer declaraciones a la prensa y ha trasladado las preguntas a los portavoces de la familia, Carmen Balfagón y Ramón Chippirrás.
Vídeo: Europa Press
El viaje de Rodolfo Sancho a Tailandia coincide con el primer mes de Daniel Sancho en la prisión de Koh Samui por el crimen del médico colombiano Edwin Arrieta. El actor ha acudido en tres ocasiones a la cárcel a visitar a su hijo, el primer encuentro tuvo lugar el pasado 6 de septiembre. Antes de abandonar el país, en Bangkok, indicaba sentirse "muy tranquilo" por cómo están tratando al joven. También explicaba que los responsables del centro penitenciario habían sido flexibles. "Parecían que iban a ser unos horarios muy férreos, que cuando se acabara ese tiempo me iban a echar. Y para nada. Me han dejado estar mucho más tiempo con Daniel del que estaba previsto y estipulado", manifestaba a la agencia Efe.
Los trámites de Rodolfo Sancho en Tailandia
Su estancia en Tailandia no solo ha tenido como objetivo visitar a su hijo, también ha aprovechado para realizar distintas gestiones, importantes para el caso. "En el juzgado, donde hemos ido a recoger unos papeles, ha sido una burocracia tremendamente funcional y rápida y sin ningún problema", manifestaba. Además, el joven chef se ha reunido con su abogado quien ha señalado que existen importantes "atenuantes" y busca un importante giro.
![Rodolfo Sancho junto a su abogado en el aeropuerto de Madrid](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1024 576"%3E%3C/svg%3E)
Rodolfo Sancho junto a su abogado en el aeropuerto de Madrid. Foto: Gtres
La defensa persigue que Daniel Sancho sea trasladado a España en cuatro años en base a un acuerdo bilateral entre ambos países, siempre y cuando no sea condenado a pena de muerte. "Si es asesinato con premeditación, pena de muerte; si quitamos la premeditación estaríamos en un homicidio que en España tiene 15 o 20 años, o 10 o 15. Pero ahí tenemos que ver las circunstancias atenuantes", explicaba Marcos García Montes a los periodistas españoles desplazados a Tailandia.