El miércoles 25 de octubre moría a los 84 años, a causa de un infarto fulminante, Fernando Fernández Tapias, uno de los grandes hombres de negocios de este país. Su inesperado fallecimiento sumía a su viuda, Nuria González, y sus hijos pequeños, Alma e Iván, en la más absoluta de las tristezas. Están siendo días especialmente complicados para ellos. A esto hay que añadir un recrudecimiento de la guerra abierta que los hijos mayores mantenían con su padre y que ha pillado a Nuria de por medio. El triste altercado vivido por las dos familias en el último adiós de Fefé (como no le gustaba que se refirieran a él, por cierto) ha empañado en parte su emotiva despedida. El tensísimo momento suma ahora un nuevo vértice tras desvelarse la última voluntad del gallego, que no quería que estos estuvieran presentes en su funeral.

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Tensión máxima en el último adiós a Fernández Tapias con sus hijos mayores

Fernando Fernández Tapias en 2018
Fernando Fernández Tapias durante un evento en 2018. Foto: Gtres.

Fernando Fernández Tapias nunca llegó a perdonar a sus hijos mayores

Nuria González y los hijos de su marido se veían las caras por primera vez en la despedida de Fernández Tapias después de años de distanciamiento. El mal rollo entre ellos fue más que evidente, según han relatado varios testigos. A su llegada, los vástagos del primer y segundo matrimonio del exvicepresidente del Real Madrid se encontraban de frente con la reticencia de un familiar de su viuda. "Son cosas que nunca deben pasar en un tanatorio, hubo mucha tensión. Es algo muy complicado y muy triste", indicaban desde 'Así es la vida', presentado por Sandra Barneda. La íntima de Nuria González, no solo les increpó, sino que les "invitó" a salir de la sala donde estaba instalada la capilla ardiente.

Ahora ha salido a la luz los motivos que habrían detonado esta situación de máxima tensión. Y es que el gallego dejó por escrito en vida que no quería que cuatro de sus hijos mayores estuvieran presentes en su funeral porque jamás llegó a perdonarles. Para entender esta afirmación y la complicada relación entre Fernández Tapias y ellos hay que remitirse a hace dos años. Más exactamente, a cuando Fernando, Borja, Sandra e Íñigo presentaron una demanda conjunta por incapacitación en el Juzgado de Primera Instancia número 65 de Madrid. Los tres mayores y, más tarde, Sandra, quisieron demostrar que su padre no estaba al cien por cien de sus capacidades para liderar sus empresas multimillonarias.

Nuria González a su llegada al tanatorio con sus hijos Ivan y Alma
Nuria González a su llegada al tanatorio con sus hijos Ivan y Alma, fruto de su matrimonio de 21 años con Fernández Tapias. Foto: Gtres

La denuncia que detonó el distanciamiento con 4 de sus 8 hijos

El empresario gallego se ha destacado hasta su muerte como uno de los grandes empresarios del país. Su labor al frente de sus compañías del sector naval y conservero le reportó unos cuantiosos beneficios. Algo que podría explicar la denuncia que interpusieron cuatro de sus ocho hijos. La batalla judicial continúo su curso y el juez dictó la incapacitación parcial del marido de Nuria González. Esto por una serie de cuestiones relacionadas directamente con su salud. Estas son: "manejo de medicamentos", "pautas alimenticias", "autocuidados" y "consentimiento a tratamientos". El magistrado estableció entonces que su tercera mujer sería su tutora en el área de salud y a Florentino Pérez, presidente del Real Madrid y amigo íntimo de Fernández Tapias, su tutor en el "ámbito económico jurídico-administrativo".

Respecto a la última voluntad del también expresidente de la CEOE, que no quería que sus hijos asistieran a su último adiós, Nuria González ha buscado en todo momento cumplir con sus deseos. "La viuda solo quería que se respetara la voluntad final de su marido y ha tratado de evitar que ellos entraran en la sala del féretro. Él dejó por escrito que no quería a sus hijos mayores en su funeral", indicaban desde el programa 'TardeAR', presentado por Ana Rosa Quintana, gran amiga de la familia. La determinación de la tercera esposa de Fefé, con la que estuvo sus últimos 21 años de vida, ha sido tal que, por esa misma razón, ha mandado retirar las coronas de flores enviadas por estos.