Si hay una famosa que nunca se pierde la Semana Santa malagueña esta es María Teresa Campos. La veterana periodista, natural de la ciudad andaluza, aprovecha siempre que tiene un hueco para regresar a su lugar de origen y, este año, ha sido mucho más especial. No solo porque significa su recuperación total a la obstrucción intestinal que sufrió hace unas semanas, sino también porque ha sido la primera sin uno de sus grandes amigos, Chiquito de la Calzada. Una amistad que compartía con su pareja, Edmundo Arrocet, y a la que han querido recordar.

 Teresa y Bigote acudieron la tarde del martes a uno de los restaurantes malagueños favoritos del cómico, ‘El Chinitas’, donde tuvo lugar un sentido homenaje al que fue, durante años, uno de sus clientes de referencia. En uno de los rincones del local y junto a la mesa en la que siempre se sentaba Chiquito, se colocó un retrato del humorista, bailaor y actor, que falleció el pasado 11 de noviembre.

 La muerte de Gregorio Esteban, como se llamaba realmente, fue especialmente dura para Bigote Arrocet y es que se encontraba de camino a Málaga para verle cuando falleció. “No ha llegado a tiempo. Cuando estaba saliendo por la puerta para ir a verle, Terelu le ha llamado para decirle que era demasiado tarde”, confesó María Teresa Campos en aquel momento. Sí que estuvo durante el funeral, en el que le vimos de lo más emocionado, sin poder evitar las lágrimas por su buen amigo.

Semana Santa en Málaga

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Si hay una famosa que nunca se pierde la Semana Santa malagueña esta es María Teresa Campos. La veterana periodista, natural de la ciudad andaluza, aprovecha siempre que tiene un hueco para regresar a su lugar de origen y, este año, ha sido mucho más especial.

Recordando a Chiquito

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No solo porque significa su recuperación total a la obstrucción intestinal que sufrió hace unas semanas, sino también porque ha sido la primera sin uno de sus grandes amigos, Chiquito de la Calzada. Una amistad que compartía con su pareja, Edmundo Arrocet, y a la que han querido recordar.

Lugar especial

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Teresa y Bigote acudieron la tarde del martes a uno de los restaurantes malagueños favoritos del cómico, ‘El Chinitas’, donde tuvo lugar un sentido homenaje al que fue, durante años, uno de sus clientes de referencia. 

Muy buen amigo

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La muerte de Gregorio Esteban, como se llamaba realmente, fue especialmente dura para Bigote Arrocet y es que se encontraba de camino a Málaga para verle cuando falleció. “No ha llegado a tiempo", contó Teresa.

Muy emocionado

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Aunque no llegó para estar a su lado en los últimos momentos, Bigote no se perdió el funeral, en el que le vimos muy emocionado.