Así es la relación de Miguel Ángel Muñoz y su madre, la vidente Cristina Blanco, que vive interna en una residencia

El actor Miguel Ángel Muñoz, que este lunes visita ‘El Hormiguero’, ha alejado a su madre del foco mediático. Cristina Blanco, que en la primera década del milenio se hizo popular como la vidente de los famosos y posteriormente fue detenida y procesada por hurto. Debido a su polémico historial el actor evita hablar de ella, que vive interna en una residencia, lo que despierta dudas sobre cómo es su relación.

La realidad es que el actor y su madre mantienen una relación muy cercana. Muñoz acude con regularidad a verla su contacto telefónico es constante. "No la ha dejado sola en ningún momento y ha acudido a todas y cada una de las reuniones con sus médicos para conocer de primera mano los datos sobre su evolución", han declarado a SEMANA personas del círculo del actor y presentador.

Otras fuentes van más allá y señalan que fue el propio Miguel Ángel el que estuvo analizando todas las opciones de internamiento de su progenitora para que contase con la mejor calidad de vida y es él quien financia su vida allí con un coste de arranque de 1500 euros mensuales.

La residencia, orientada a personas mayores de 65 años en situación de dependencia, cuenta con diferentes salas comunes como salas de estar, unidad de grandes dependientes, preciosas zonas ajardinadas y terrazas, un gimnasio, salas de actividades e incluso una biblioteca.. 

Le amputaron una pierna en 2023

Tal y como informó SEMANA en exclusiva hace algo más de un año, a Cristina Blanco tuvieron que amputarle una pierna después de pasar varios meses ingresada en el hospital por una gravísima dolencia. De vez en cuando, la que fuera pitonisa VIP disfruta de algunas salidas al exterior con sus amigas o el propio Miguel Ángel. Algo que le viene bien para sus dolencias ya que también batalla con problemas de salud mental. 

Una condena por robo de 16 meses de cárcel

Cabe recordar que en el año 2007 Cristina fue acusada de robar en un hotel en Málaga tarjetas de crédito y móviles a los clientes del alojamiento. Aquel episodio, por el que fue condenada a 16 meses de cárcel, aunque por su falta de antecedentes y la duración de la condena no tuvo que pisar el presidio, sirvió para que comenzase sus tratamientos psicológicos e ingresase durante un tiempo en la Clínica López Ibor.  Allí le diagnosticaron un trastorno bipolar.

Son pocas las ocasiones en la que Muñoz ha hablado de este tema tan espinoso. Una de ellas fue ante Risto Mejide en su famoso Chester en el año 2017. "Mi madre decidió apartarse y quedarse en un segundo plano, prácticamente invisible, para que a mí no me tuviesen que hacer este tipo de preguntas y eso lo agradeceré siempre", declaró. "Estoy muy orgulloso de ella porque salió adelante y a lo largo de los años me ha dado muchas lecciones de vida", sentenció el actor, no antes de recalcar: "Yo estoy muy orgulloso de mi madre. He estado, estoy y estaré siempre con ella, apoyándola, para lo que necesite".

Durante un tiempo Cristina Blanco disfrutó de una vida sencilla y anónima y trabajó como dependienta de perfumería en unos conocidos grandes almacenes en la zona sur de Madrid.

Las hermanas anónimas de Miguel Ángel

También viven muy pendientes de la tarotista las dos hermanas menores de Miguel Ángel, que son completamente anónimas. Se trata Gabriela y Mabila, dos niñas que Cristina Blanco adoptó a finales de los años 90. De ellas poco se sabe más allá de lo que se publicó cuando la vidente las trajo a España desde Bolivia y fueron apadrinadas por Laura Valenzuela y Jesús Mariñas: siguen a su hermano en redes y tras la separación de Cristina Blanco y su marido se fueron a vivir con su padre.

Años de gloria y fama

Fue en la década de los noventa cuando el nombre de Cristina Blanco se convirtió en célebre gracias a María Teresa Campos. En los programas de la comunicadora ejercía de vidente y contertulia, lo que la convirtió en uno de los rostros más conocidos de la prensa rosa.

 

"Llegó a cobrar 300.000 de las antiguas pesetas (unos 1.800 euros) por una tirada de cartas en el hotel Villamagna de Madrid a una millonaria de Oriente Medio", nos desliza una persona próxima a su entorno.

Su presencia no faltaba en las reuniones, fiestas y eventos de la jet set española y su amistad floreció con personajes como las Campos, Lara Dibildos o Rosa Benito. Durante un tiempo llegó a ejercer como representante de Belén Esteban pero su relación se torció cuando animó a la de Paracuellos a realizar montajes mediáticos que erosionaron su imagen pública.