Cristina Pedroche atraviesa una de las etapas más intensas y emocionales de su vida. Mientras se encuentra en la recta final de su segundo embarazo, la presentadora madrileña ha decidido refugiarse en sus raíces: su barrio de Vallecas, su infancia, y, sobre todo, su familia. Lejos de los platós y los cámaras, Cristina Pedroche ha encontrado consuelo y apoyo en sus padres, Domi y Paco, y en la figura de su prima Marta, a quien considera su hermana del alma.

Aunque las últimas semanas han estado marcadas por rumores sobre una posible crisis con su marido, el chef Dabiz Muñoz, lo cierto es que Pedroche ha preferido centrarse en su bienestar y el de su bebé. Y para eso ha regresado a casa: a la habitación donde creció, con las paredes intactas, los recuerdos suspendidos en el tiempo, y el calor de un hogar humilde que siempre ha sido su mayor sostén.

La relación de Cristina Pedroche con sus padres, Domi y Paco

Cristina Pedroche ha hablado en numerosas ocasiones del vínculo inquebrantable que mantiene con sus padres. Tanto Domi como Paco han sido piezas clave en su vida personal y profesional. En tiempos difíciles, cuando apenas comenzaba en la televisión, fueron ellos quienes la animaron a perseguir sus sueños. En palabras de la presentadora, sus padres "se mataron por darle lo mejor", aunque no siempre pudieron permitírselo todo. Por eso, desde muy joven, Cristina Pedroche comenzó a trabajar en múltiples oficios, como dependienta o azafata de imagen.

Después de crecer en un entorno humilde, la colaboradora ha reivindicado en más de una ocasión el esfuerzo que ha supuesto para su familia salir adelante. Su madre, Domi, trabajó durante años como limpiadora en un colegio por 800 euros al mes, mientras que su padre se quedó en paro poco antes de la jubilación. Fue entonces cuando Cristina decidió contratarlo como su chófer personal, gesto que refleja la gratitud y el profundo cariño que siente por él.

Durante esta segunda gestación, marcada por cambios emocionales y físicos, ha querido volver a su casa natal. Según ha contado ella misma, duerme en su antigua habitación, que se mantiene tal y como era en su adolescencia, sin grandes cambios. Allí recuerda su etapa de fan incondicional de Pedja Mijatovic, exjugador del Real Madrid, cuyas fotos aún decoran alguna esquina. Una vuelta al pasado, que lejos de entristecerla, la reconforta durante el embarazo de su bebé.

Cristina Pedroche y Dabiz Muñoz se conocieron hace casi una década en un evento deportivo. Desde entonces, han construido juntos una historia de amor sólida y llena de complicidad. Ocho meses después de aquel primer encuentro, la pareja se casó, y desde entonces han compartido vida, proyectos y familia. En julio de 2023 nacía su primera hija, Laia, una bebé que ha transformado por completo a ambos.

En sus redes sociales, Cristina no ha dudado en compartir la ternura que siente al ver a Dabiz en su faceta de padre: "Pensaba que no podía estar más enamorada de ti, pero cuando te veo cómo la miras, cómo le hablas... me derrito". Sin embargo, en las últimas semanas, han saltado las alarmas por la supuesta distancia entre ellos. A pesar de los rumores, la presentadora ha optado por guardar silencio, mantenerse al margen de las habladurías y centrarse en su maternidad. Sus padres, conscientes de la presión mediática que vive su hija, se han convertido una vez más en su escudo y su refugio.

Marta, más que una prima: una hermana de vida

Cristina Pedroche es hija única, pero nunca ha sentido esa condición como un vacío. El motivo tiene nombre propio: Marta, su prima, su amiga y su hermana de la vida. Ambas crecieron puerta con puerta en Vallecas y se llevan tan solo cuatro meses de diferencia. Han compartido juegos, adolescencia, confidencias y sueños. Tanto es así, que Cristina no duda en afirmar que "Marta es como una hermana para mí". La complicidad entre ellas es total, y prueba de ello es que fue Marta quien se encargó de hacer la tarta nupcial en la boda de Cristina y Dabiz. Además, la presentadora ha compartido en diversas ocasiones lo importante que es contar con personas de confianza que la acompañen en su vida, más allá de la fama o el éxito en su trabajo.

Desde que fue madre por primera vez, Pedroche ha intentado compartir su experiencia con la maternidad con total sinceridad. Lejos de mostrar una imagen inverosímil, ha reconocido las dificultades del posparto y los sentimientos encontrados al reincorporarse al trabajo. "He puesto una cámara en casa para ver a mi madre con mi hija... y me da mucha pena", confesaba al poco de volver a sus compromisos profesionales. Ahora, con un segundo bebé en camino, Cristina ha decidido parar, respirar y apoyarse en los suyos. Y lo hace desde ese lugar donde empezó todo: su casa de Vallecas, con sus padres a su lado, su hija en brazos y su prima Marta cerca.