Puso tierra de por medio con la esperanza de que la justicia no la reclamara, pero María Jesús Ruiz ha tenido que abandonar temporalmente Supervivientes para seguir con el proceso que inició contra su expareja, José María Gil Silgado, hace un año. Si bien es cierto que la modelo retiró la denuncia por malos tratos contra el padre de Alba, su hija mayor, el procedimiento ha seguido su curso y ahora tiene que hacerle frente.

Las últimas imágenes que teníamos de ella eran en el concurso, enfadadísima por tener que regresar antes de tiempo y maldiciendo “la hora en la que conocí a Gil Silgado”. Parece que el largo vuelo ha calmado un poco a la que fuera Miss España 2004, pues, como SEMANA te muestra en primicia, a su llegada al aeropuerto de Madrid Barajas parecía estar tranquila, evitando hacer cualquier gesto con la cara que se pudiera interpretar.

La silenciosa llegada de María Jesús Ruiz

Acompañada de dos trabajadores del programa, que no la soltaron en ningún momento, María Jesús Ruiz se aisló de los sonidos del exterior gracias a unos auriculares y es que parte del trato contacto con nadie más que con su abogado. Además, tendrá que mantener la dieta que hubiera seguido en la isla. “Va a mantener las mismas condiciones alimentarias que el resto de los concursantes, es decir, durante este viaje, María Jesús solo se alimentará con la ración diaria de comida que le corresponde en la isla: 50 gramos de arroz y una ración pequeña de pescado”, reveló Sandra Barneda cuando anunciaron que tendría que regresar a España.

Una vez finalice la sesión, María Jesús Ruiz volverá a coger un avión para volver al concurso y, al estar nominada, corre el riesgo de tener que coger un vuelo de vuelta a España si finalmente el público decide que no debe seguir formando parte de Supervivientes.

Regreso obligatorio

regreso-obligatorio

Puso tierra de por medio con la esperanza de que la justicia no la reclamara y tuviera que dejar el concurso, pero María Jesús Ruiz ha tenido que abandonar temporalmente Supervivientes para seguir con el proceso que inició contra su expareja, José María Gil Silgado, hace un año.

Triste adiós

triste-adios

Si bien es cierto que la modelo retiró la denuncia por malos tratos contra el padre de Alba, su hija mayor, el procedimiento ha seguido su curso y ahora tiene que hacerle frente. La despedida de su compañeros no pudo ser más dramática. 

Enfado en público

enfado-en-publico

La reacción de la modelo al conocer que tendría que volver a España para ir al juicio fue enfadarse y maldecir “la hora en la que conocí a Gil Silgado”. 

Tranquila

tranquila

A pesar de que seguramente siga disgustada, parece que el largo vuelo ha calmado un poco a la que fuera Miss España 2004, pues, como SEMANA te muestra en primicia, a su llegada al aeropuerto de Madrid Barajas parecía estar tranquila, evitando hacer cualquier gesto con la cara que se pudiera interpretar.

Muy protegida

muy-protegida

Acompañada de dos trabajadores del programa, que no la soltaron en ningún momento, María Jesús se aisló de los sonidos del exterior gracias a unos auriculares y es que parte del trato contacto con nadie más que con su abogado. 

Mismas condiciones

mismas-condiciones

Además, tendrá que mantener la dieta que hubiera seguido en la isla. “Va a mantener las mismas condiciones alimentarias que el resto de los concursantes, es decir, durante este viaje, María Jesús solo se alimentará con la ración diaria de comida que le corresponde en la isla: 50 gramos de arroz y una ración pequeña de pescado”, reveló Sandra Barneda cuando anunciaron que tendría que regresar a España.