Continuamos aquí tras el chaparrón y en el chaparrón. Sí, en Madrid llueve, no deja de hacerlo desde anoche, qué fresco y qué desapacible todo... Pero no me quiero ir por las nubes. Bajamos a tierra y entramos en el CaixaForum de Madrid, la sede social y cultural de La Caixa, donde hoy los Reyes han entregado las Becas a 120 jóvenes maravillosamente preparados, que seguirán su formación en las mejores universidades del mundo. Qué aspiracional, cuánta ilusión desprenden... Así se lo ha hecho notar el Rey Felipe. Ellos son el futuro.

Letizia estaba a su lado. Media sonrisa, tranquila, actitud modesta. Es lo que he visto. Quizás tendemos a sobreinterpretar cualquier movimiento, pero está claro que la Reina no debe haberlo pasado bien estando en el centro de tanta polémica. Ahora toca enmendar el error, o lo que sea. Tanto si lo que vimos, era, como si no lo era.

Me da la impresión de que está en ese punto de no querer pasarse en nada. Como ella no suele tomar la voz cantante, ha optado por no dar demasiado que hablar por sus modelitos. Hay grandes ejemplos en el pasado reciente. Lo que hoy nos ha mostrado es un estilismo bastante recatado y brumoso. Y por ello, algo aburrido.

A saber: falda plisada midi con estampado de flores de Hugo Boss, que estrenó el pasado noviembre; junto a un top finísimo azul claro de Hugo Boss, con cuatro botones en los puños; y unos zapatos de charol azul marino/petróleo con tira cruzada de Magrit.

Y su manicura roja...

La única novedad son los pendientes. Esta temporada suponen una de sus inversiones recurrentes. De nuevo una pieza de Coolook, pero no una cualquiera, no, sino una con trasfondo solidario.

Su nombre es Lluvia (curioso, ¿no). Son desmontables, realizados en plata cubierta de oro champán y piedras naturales de calcedonia aguamarina y topacio talladas a mano de forma irregular.

Forman parte de una iniciativa promovida por Irene Villa, y el 100% del beneficio de su venta irá destinado a financiar un proyecto en colaboración con la empresa solidaria AUARA para llevar agua potable a zonas necesitadas. Son una edición limitada, también hay disponible en colgante, y cuestan 190 euros.

Pues muy bien, ¿no? Es estupendo colaborar con las buenas causas, y una Reina puede ser el mejor estandarte. Los pendientes es lo único que ha brillado en esta jornada.

Letizia: llega Su Majestad Modesta
Letizia no se ha desprendido de su cartera azul de Carolina Herrera.

Tras la entrega de las becas, a cuatro manos por parte del Rey Felipe y Letizia, se ha celebrado un cóctel informal en la primera planta. Las chicas de la tienda del edificio habían cerrado, pero se asomaban a curiosear. Todos los invitados subían por las hipnóticas escaleras blancas diseñadas por Herzog&De Meuron... Y cuando los Reyes han aparecido después de la foto de familia con estos jóvenes portentos, han saludado y charlado de corrillo en corrillo, y han atendido amablemente a los que querían hacerse fotos con ellos (que son muuuchooossss).

Así, de cerca, he notado a Letizia un poco mustia, un poco de bajón, una mirada un tanto triste. Pero quizás es una impresión equivocada. Ya lo dijo la infanta Pilar: "Un mal día lo tiene cualquiera". A veces las imágenes son engañosas. O puede que sea solo el tiempo...

Letizia: llega Su Majestad Modesta
Con paso presto y vamos ya hacia mañana, que tenemos más trabajo... ¡Gracias a todos!