El mes de octubre se ha vuelto agridulce para Kiko Rivera. Hace apenas unos días, el pasado 27 de octubre, el dj cumplía uno de sus sueños y actuaba en Nueva York con todas las entradas vendidas, demostrando que, como su madre ha hecho cientos de veces, él también es capaz de agotar las localidades en sus apariciones. Sin duda, una buena noticia después de que, a mediados de año, en el mes de mayo, anunciara que se retiraba de los escenarios, los medios y las redes sociales tras sufrir una depresión que ya ha superado.

¿Y en España?

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Si bien Kiko ha actuado en la ciudad de los rascacielos, son muchos los que se preguntan cuándo le tocará el turno a España, donde no actúa desde su reaparición en Mula, Murcia, el pasado 28 de septiembre. Desde entonces, nada en su agenda nacional.

Agenda despejada

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A pesar del gran triunfo personal que ha vivido, lo cierto es que ha Rivera le persiguen varios fantasmas del pasado que podrían truncar su futuro profesional.

Demandado en los tribunales
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Según cuenta Look, el pasado 1 de octubre el hijo de Isabel Pantoja fue condenado a pagar 7.277,91 euros por incumplir un contrato de trabajo.

No apareció

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Los hechos sucedieron hace dos años, en el verano de 2016, cuando Kiko Rivera no apareció en una actuación que tenía contratada con el empresario Carlos Poveda en la sala alicantina Danza Club.

Todo el mundo esperaba al dj

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Todo estaba listo para que Kiko, que había cobrado el 50% del caché por adelantado, saliera a pinchar a un local a rebosar que había pagado por verle en directo, pero finalmente no se presentó.

Estaba en el hotel

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Según Rivera, el marido de Irene Rosales se encontraba en la habitación del hotel y ni siquiera pudo hablar con él a pesar de haberle llamado varias veces. “Era increíble porque poco antes habíamos estado juntos picando algo. La gente empezó a ponerse nerviosa en el local así que fui hasta el hotel para averiguar qué pasaba, pero el portero no me dejó pasar. Kiko no quería salir de su habitación. Después de un rato, su representante me dijo que estaba enfermo”, dijo en aquel momento.

¿Estaba enfermo?

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Si bien el representante asuró que estaba malo, al empresario nunca le llegó un parte médico o un justificante de su ausencia, así que decidió interponer medidas legales y demandarle.

Consecuencias para el negocio

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Que Kiko no se presentara a la actuación supuso que Carlos tuviera que devolver el precio de las entradas al público y dar la cara, explicando que simplemente les había dejado ‘colgados’.

La justicia ha hablado

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Dos años después, el pasado 1 de octubre, la justicia tomó una decisión sobre la demanda, condenando al artista.

Una gran cantidad

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A la cuantiosa cifra hay que sumarle los intereses y las costas, por lo que al final lo que tiene que pagar Rivera Pantoja está cerca de los 10.000 euros.

La resolución de la Audiencia

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“La sentencia condena al demandado al pago de una parte de la indemnización interesada en la demanda a causa de su incumplimiento contractual”, se puede leer en la información publicada por Look.

No era todo lo que pedía

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El medio se ha puesto en contacto con el abogado del empresario, que afirma que el juez les ha dado la razón en todo lo que pedían a excepción de la cantidad solicitada, que en un principio ascendía a 12.000 euros.

No tuvo respuesta

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Cabe recordar que cuando Carlos Poveda interpuso la demanda contra el dj, este no siquiera contestó al requerimiento.

Tampoco acudió al juicio

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Kiko tampoco acudió al juicio, aunque después pretendió demostrar que sí lo hizo.

Sin preocupaciones

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Si bien Rivera todavía no se ha pronunciado al respecto, lo cierto es que no parece estar preocupado por este tema. De hecho, hace unos días viajó a México para disfrutar de unas vacaciones junto a su mujer en un lujoso hotel que les costaba más de 500 euros la noche.