Durante muchos años, el contouring ha sido una de las técnicas más utilizadas a la hora de maquillarte ya que conseguías definir y realzar la estructura facial.​ Las caras esculpidas de las Kardashians han llevado al bronzer a vivir su momento más álgido. Posteriormente a eso llegó el strobing, que era la técnica para iluminar ciertas partes del rostro a través de correctores o iluminadores con el objetivo de lograr dimensión y definición en el rostro. Y este verano, la tendencia da un más y trae el non-touring. Ahora, lo ideal es salir a la calle y que parezca que no lleves absolutamente nada de maquillaje.

Con esta nueva técnica, que ha llegado para quedarse, se busca un efecto ligero y proporcionar un look natural en el rostro. Algo parecido al make up-no make up, pero en el que se trabaja con el iluminador. La clave está en dar luz a tu rostro, con toques muy suaves. Muchos se preguntarán, ¿en qué se diferencia del contouring? Lo cierto es que el non-touring propone un acabo parecido al de contouring pero sin llegar a contornear y utilizando menos productos. Se trata de esculpir las facciones del rostro sin utilizar tonos oscuros, bronceadores, polvos de sol... sino que hay conseguirlo únicamente con el iluminador y un maquillaje sutil.

Conseguir este tipo de maquillaje es muy fácil. Te contamos los pasos a seguir para conseguir el non-touring perfecto.

  1. El primer gesto necesario (al igual que para cualquier maquillaje) es tener la piel limpia. Utiliza los productos habituales antes de maquillar tu rostro. Posteriormente aplícate una crema hidratante con color o una base de maquillaje ligera y con luz. Una de las opciones más recomendables es la BB Cream.

  2. La importancia del iluminador. Aplícalo con cuidado resaltando los puntos de tu rostro de una manera más notable que el resto. Estas zonas serían la parte alta de las mejillas, el puente de la nariz, la parte superior del labio y tu barbilla. Ojo con la cantidad que utilizas. Lo ideal es uno sutil, sin exceso de brillos para un acabado natural y una piel de aspecto fresco y satinado. Usa productos luminosos pero no con destellos.

  3. Si quieres completar tu beauty look, apuesta por un colorete muy suave en tus mejillas. Y ¡voilá! Piel luminosa, jugosa y perfecta para tus días de verano