Amor, pasión y lujo, así se llamaría una película sobre la vida de Carmen Cervera (80 años). La que fuera esposa de Tarzán -Lex Barker-, madre soltera, baronesa Thyssen y una de las mujeres más ricas de España, ha protagonizado portadas y cientos de páginas de la prensa rosa por su vida de lujo y fiestas y su amor al arte y a los hombres.
Pero su gran amor fue Hans Heinrich von Thyssen-Bornemisza o, lo que es lo mismo, el barón Thyssen, a quien conoció, casi por casualidad, en una fiesta de lujo a la que no tenía ninguna intención de asistir. Él, un archimillonario aristócrata alemán, ella, una miss España 20 años menor.
Cómo se conocieron Tita Cervera y el barón Thyssen
Todo ocurrió en 1981. Unos amigos de Carmen Cervera, los Davidoff, organizaron un viaje en crucero por Cerdeña, pero ella no tenía ganas de acudir. "Yo no quería ir, porque no quería salir de casa. (...) Pero mi madre me dijo: 'Vete un poco, ya está bien, sal'. Y me fui", confesó la exmodelo años más tarde. Cogió las maletas y se apuntó al plan.
Durante el viaje, sus amigos intentaron convencerla para ir a la Costa Azul, donde se celebraría una fiesta de lujo con lo más granado de la alta sociedad, pero Tita rechazó la invitación y decidió volver a España. Sin embargo, el destino hizo de las suyas y, cuando llegó al aeropuerto, todos los vuelos de regreso estaban completos. Se dio la vuelta y asistió a la cena, donde conocería a su futuro tercer marido; que entonces estaba casado, y cuya mujer estaba presente en la celebración.
El barón pertenecía a una de las familias más poderosas del continente. Tenía fama de truhan y le encantaban las fiestas y el alcohol, pero su gran pasión era el arte, y tenía en su poder una de las colecciones más exclusivas y ricas del mundo.
El barón no tuvo ningún reparo en ligar con Tita aunque su mujer estuviera presente
Cuando Tita Cervera conoció al barón, éste iba acompañado de su cuarta esposa, Denise Shorto, pero inmediatamente notó que él estaba interesado en ella: "no hacía más que mirarme y yo no sabía dónde mirar", confesaría años más tarde. Esa misma noche, la invitó a cenar, pero la catalana le puso una condición: "Si vamos todos, sí".
Como contaría Tita años después, al día siguiente fueron a cenar: "llegamos en una canoa, porque Heini tenía un embarcadero. Él estaba esperándonos ahí y me cogió del brazo y me llevó hacia su casa. Hubo un buffet con amigos y se puso a mi lado. Luego nos fuimos a bañar juntos (...). Ahí me dio un beso en la mejilla". A partir de ese momento ya no se separaron, su relación llegó a las portadas de las revistas del corazón y que en 1985 se dieron el sí quiero definitivo. A partir de su matrimonio, Carmen Cervera se convirtió en 'baronesa Thyssen'.
Los invitados a la boda de Tita Cervera y el barón Thyssen
La boda se celebró en Inglaterra. Ella venía de 2 matrimonios fallidos y tenía un hijo, Borja, de 6 años. Él se casaba por quinta vez. A la celebración acudieron personalidades de toda Europa, desde los duques de Marlborough hasta amigos de la novia, como la infanta Pilar y su marido, Luis Gómez-Acebo, que además fue el padrino. Tita Cervera lució un traje de chaqueta de dos piezas en blanco impoluto firmado por Jacqueline de Ribes.
Un año antes de la boda el barón ya había adoptado a Borja, a quien le daría su apellido. Durante 20 años, se creyó que el alemán era el padre biológico del pequeño, pero la verdad salió a la luz en 2009, cuando se desveló que en realidad su hijo era de Manolo Segura, un publicista con quien la ex Miss España tuvo un tórrido romance antes de conocer a Heini.
Las curiosidades que rodearon aquella boda del 16 de agosto de 1985, fueron varias. Una es que se celebró dos días después de que el barón recibiera la noticia de que oficialmente estaba divorciado de Denisse Shorto, cuyo matrimonio fue de todo menos tranquilo. "Era un 14 de agosto y estábamos en la Costa Brava. Heini dijo: 'Nos casamos pasado mañana'. Y así fue", confesó Tita Cervera más tarde en una entrevista a Vanitatis.
La que fuera Miss España también contó que celebraron una fiesta un mes después junto con los invitados que no habían podido acudir a la boda. Tuvo lugar en el mismo castillo donde se casaron, en el palacio de Daylesford, que pertenecía al barón. Hasta allí fueron, entre otros, el padre de Diana de Gales, John Spencer, y Carmen Martínez-Bordiú. En esa 'segunda boda', la novia lució una de las joyas más valiosas de su joyero, la 'Estrella de la paz'.
Una vida de lujo, fiestas, arte y joyas
El matrimonio entre Tita Cervera y Heini Thyssen estuvo marcado por glamurosas fiestas en Marbella y Madrid. Eran asiduos a acudir a eventos tanto privados como públicos, incluyendo galas organizadas por instituciones como la Cruz Roja. Sin embargo, en los años 90, la salud del barón empeoró y Carmen Cervera se convirtió en su mayor apoyo, más retirada de la vida pública.
La Estrella de la Paz, la joya más impresionante de Tita Thyssen
En ocasiones, Heini demostraba su amor hacia la baronesa regalándole joyas de incalculable valor. Es más, según el periodista David Litchfield en el libro 'La historia secreta de los Thyssen', "se estima que durante los 17 años de matrimonio, Heini se gastó al menos 30 millones de dólares en joyas para Tita".
La joya más apreciada que hay en su poder es la 'Estrella de la Paz', un diamante en forma de pera que adquirió el barón y que luego lo transformó en un colgante. La piedra preciosa tiene 170 quilates y por su tamaño es considerada de las más grandes del mundo.
La baronesa la lució en su segunda fiesta nupcial, pero han sido pocas las ocasiones en las que se la hemos visto puesta. Una fue en la inauguración del Museo Thyssen en el año 1992, donde acudieron Juan Carlos I y Doña Sofía. La prensa de la época comparó a las dos protagonistas de la noche, la mujer del rey emérito y a la aristócrata, diciendo que la que más brilló fue la catalana gracias a la gran joya que vestía su cuello.
La historia de amor entre Tita Cervera y el barón Thyssen estuvo marcada por el amor, el lujo, el arte y por un sinfín de fiestas que los convirtieron en los reyes de la noche. Fallecido en el año 2002 por causas naturales, Heini fue y sigue siendo para Carmen Cervera el amor de su vida. “Conocer a Heini ha sido espectacular", confesó ante las cámaras de TVE en 2022.