Romántica escapada a la Ribera del Duero
Disfruta del patrimonio cultural y gastronómico que ofrece la localidad burgalesa de Aranda de Duero.
Una estupenda opción para desconectar de las obligaciones y plantar cara al estrés es realizar una romántica escapada a la Ribera del Duero, concretamente a Aranda de Duero. Asentada en un subsuelo repleto de históricas bodegas, esta localidad burgalesa conserva su aire de villa medieval convirtiéndote, al visitar sus calles y monumentos, en protagonista de un viaje al pasado. Pero, además, Aranda es un paraíso gastronómico gracias a su amplia oferta de restaurantes, entre los que destacan sus tradicionales asadores.

La iglesia de Santa María la Real, de Aranda de Duero, fue construida entre el siglo XV y el siglo XVI.
CASA FLORENCIO, 70 AÑOS A FUEGO LENTO
Uno de los más reconocidos es el asador Casa Florencio, el más antiguo de Aranda de Duero con 70 años de solera. Nada más atravesar sus puertas castellanas, se advierte el aroma y el sabor a horno de leña, a tradición y a hogar de este restaurante ubicado en el número 14 de la emblemática calle Isilla.

Inaugurado en 1949, Casa Florencio es el asador más antiguo de Aranda de Duero.
Su dueño desde 2004, Rafael Miquel, ha seguido la filosofía de su fundador, Florencio Arandilla, al apostar por la calidad y el buen servicio, aunque introduciendo innovaciones para adaptarse a los nuevos tiempos. Así, ofrece exquisitos menús tradicionales aderezados con productos de la tierra como la morcilla o el chorizo, en los que el cordero lechal (con el sello de calidad Lechazo Asado) es la joya de la corona.

Rafael Miquel está al frente del gran equipo de Casa Florencio, en Aranda de Duero (Burgos).
Pero, además, Casa Florencio tiene su gastrobar, con servicio en barra, donde se pueden degustar originales tapas y pinchos. Todo esto regado con los mejores caldos de la DO Ribera del Duero con los que poder realizar el maridaje perfecto. Por cierto, siempre hay que dejar un hueco para degustar su delicioso hojaldre relleno con crema.
GASTROTECA LA PÍCARA, COCINA DE FUSIÓN
Pero Aranda de Duero también cuenta con restaurantes que están a la vanguardia de la cocina. Uno de los más destacados es la gastroteca La pícara, situada a los pies de la iglesia Santa María la Real. Este local está regentado desde 2015 por Félix Marina, un restaurador y viticultor, que forma un tándem perfecto junto a su mujer, Sandra Chicote, al mando de los fogones.

En el gastrobar La Pícara hay una amplia oferta de vinos de la Ribera del Duero. Foto: Carlos Muiña.
Sandra decidió un día dejar su prometedora carrera como ingeniera de telecomunicaciones para dedicarse a su gran pasión la cocina. Así, esta joven autodidacta y creativa, se atrevió a ofrecer algo hasta entonces nunca visto en Aranda de Duero: una cocina fusión tradicional con influencia asiática y peruana que supone un auténtico regalo para los sentidos. En su original carta se pueden degustar platos únicos como: ceviche de vieira con emulsión de kimuchi y lima; hamburguesa de sepia con cebolla caramelizada, salsa de tinta de calamar y emulsión marina, y manitas de lechazo deshuesadas con salsa reducida y bolita de choripan.

Félix Marina y Sandra Chicote regentan la gastroteca La Pícara en Aranda de Duero (Burgos). Foto: Carlos Muiña.
Pero en casa de un amante del vino, no pueden faltar buenos caldos y de eso sabe mucho Félix, que, entre su amplia oferta ribereña, ofrece sus excelentes vinos blancos de uva Albillo Mayor: Feliz, Más Feliz que una perdiz y Requete Feliz. Nombres que son toda una declaración de intenciones de Félix, Feliz en latín. Pero eso no es todo, ya que La Pícara se conecta con una sala polivalente, que, entre otras cosas, se utiliza para ofrecer catas de vino, y La Traviesa, un precioso bar de diseño donde se realizan conciertos y monólogos.
HOTEL LAS BARONAS, RELAX Y DESCONEXIÓN
Si el viajero de esta romántica escapada a la Ribera del Duero prefiere alejarse del mundanal ruido cuando se apagan las luces de la ciudad, una estupenda opción es dirigirse al Hotel Las Baronas, situado en la pequeña localidad de Santa Cruz de la Salceda, a solo 16 km de Aranda de Duero.

El hotel rural Las Baronas se encuentra en la localidad de Santa Cruz de la Salceda (Burgos).
Ubicada junto a la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, esta preciosa casa señorial del siglo XVII, que cuenta con bar y restaurante, perteneció a la familia Varona, descendientes de María Pérez, la legendaria guerrera que alrededor del año 1120 venció y capturó, disfrazada de hombre, al rey Alfonso I de Aragón (el Batallador) durante una contienda que enfrentaba a este con su hijastro Alfonso VII, rey de Castilla y León. Una hazaña que le valió a la intrépida castellana el título de Varona.

En agosto, Aranda se llena de música y alegría con el Festival Sonorama Ribera, que este año celebra su 26 edición. Foto: Carlos Muiña.
Y EN AGOSTO, SONORAMA RIBERA
Cualquier fin de semana es bueno para gozar de la gastronomía, buen vino y patrimonio artístico de Aranda de Duero, pero si, además, queremos disfrutar de buen tiempo y buena música, apúntense esta fecha: del 9 al 13 de agosto. Por entonces, las calles de la ciudad burgalesa se llenarán de música, alegría y diversión gracias a la 26 edición del Festival Sonorama Ribera. ¿Alguien da más?