Hipertensión: 6 consejos clave para mantenerla a raya
Es una enfermedad que no produce síntomas, pero que si no se controla conlleva graves problemas cardiovasculares. Te damos las claves para plantarle cara a tiempo
De los 14 millones de españoles que sufren hipertensión, cerca de 10 millones no llevan un buen control de este trastorno, algo muy preocupante, ya que pasar por alto este problema no solo puede desencadenar enfermedades cardiovasculares, sino también afectar a otros órganos vitales. ¡Toma nota y cuídate!
Un enemigo muy silencioso que hay que vigilar
La hipertensión es una enfermedad crónica que se caracteriza por un incremento continuo de las cifras de la presión sanguínea en las arterias. La presión arterial alta no tiene síntomas, por ello, la única manera de averiguar si se sufre es a través de chequeos regulares. Los niveles adecuados deben estar siempre en 120/80 mm Hg.
La presión arterial no es constante, el sistema nervioso influye en ella y se altera con los cambios de respiración y la frecuencia cardiaca. En ciertas circunstancias puede darse un pico de presión y, en cambio, durante el sueño bajar considerablemente. Recuerda tomarte la presión siempre a la misma hora: tres veces por la mañana (entre las 6 h y las 9 h) y otras tres por la tarde (entre las 18 h y las 21 h).
Tiene tres principales causas
✔ El sobrepeso
Cuanto más pesas, más sangre necesitas para suministrar oxígeno y nutrientes a tus tejidos. Por ello, a medida qu aumenta el volumen de sangre que circula a través de los vasos sanguíneos, también lo hace la presión sobre las paredes arteriales.
✔ La edad
La presión arterial alta suele aumentar con la edad. También los hombres son más propensos a desarrollar hipertensión arterial que las mujeres hasta que éstas llegan a la edad de la menopausia, etapa en la que se iguala.
✔ Malos hábitos
Beber, fumar o la vida sedentaria aumentan el riesgo de sufrirla.
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Así puedes reducirla
1- Come bien
Lo mejor es llevar una alimentación saludable que contenga cereales integrales, frutas, verduras y productos lácteos con bajo contenido en grasa. Además, también es fundamental evitar el alcohol y el tabaco.
2- Reduce la sal
Es muy importante controlar la cantidad de sal que consumes cada día. Al hacer la compra, evita los platos precocinados, los alimentos ahumados, aperitivos salados y las conservas. Lee las etiquetas de los productos y elige los que tienen menos de 0,5 gramos de sodio por 100 gramos de alimento.
3- Controla el estrés
Cuando estamos estresados nuestro ritmo cardíaco se acelera, esto se debe a que el organismo libera adrenalina para poder mantenernos en guardia. Por ello, es clave que encuentres la manera de relajarte. Practicar técnicas como yoga, pilates o taichí puede ayudarte a canalizar el estrés y a reducir los valores de tu tensión arterial.
4- Toma el sol
¿Sabías que los rayos solares ayudan a sintetizar la vitamina D, y que ésta es muy necesaria para controlar la presión? De hecho, la Universidad de Michigan (EE. UU.) ha demostrado que las mujeres que llegan a la menopausia con déficit de vitamina D tienen un más riesgo de padecer hipertensión. Eso sí, toma el sol siempre de manera responsable.
5- Duerme lo suficiente
Cuando duermes tu presión baja, ya que el corazón se relaja. De hecho, está comprobado que el riesgo de hipertensión puede aumentar en un 37% si se duerme una hora menos de lo que se debería durante cinco años seguidos.
6- Haz ejercicio regular
La actividad física regular (por ejemplo, andar a paso ligero durante 45 minutos cada día o nadar 3 veces por semana) puede reducir la presión arterial notablemente. Pero sobre todo recuerda que es importante ser constante, porque si dejas de hacer ejercicio, la presión arterial puede volver a subir.