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Ardor y pesadez: no dejes que te amarguen las navidades

Las comidas copiosas y el exceso de alcohol aumentan los problemas digestivos. Te contamos qué debes hacer para disfrutar de las navidades sin preocuparte de tu estómago

Comidas familiares, cenas de empresa... Ya casi es Navidad y se avecinan unos días complicados para cuidarse y no comer más de lo necesario. ¿Las consecuencias? Estos excesos pueden provocar digestiones pesadas, distensión abdominal, ardor, náuseas o malestar general. Te contamos qué puedes hacer para evitarlo.

Mastica mucho

El primer paso para hacer una buena digestión comienza por masticar los alimentos adecuadamente. Si lo haces de forma inadecuada va a llegar comida menos triturada a tu estómago, dificultando su labor, por lo que la digestión se ralentizará. Cada bocado de comida debe masticarse como mínimo 7 u 8 veces, así que olvídate de engullir y de tragar los alimentos casi enteros.

No bebas en exceso

No solo bebidas alcohólicas, sino todas las que suelen acompañar a las comidas, especialmente los refrescos azucarados llenos de gas y calorías. Además, ten en cuenta que la digestión se realiza en tu organismo a una temperatura de unos 37ºC, y cuando consumes bebidas que están muy frías, tu cuerpo se ve obligado a contrarrestar esta diferencia de temperatura, lo que produce una alteración en la circulación de la sangre, que lo único que va a conseguir es retrasar tu digestión e irritar la mucosa del estómago.

¿Postres? Mejor sin azúcar

Estas fechas son muy dadas a los dulces, por lo que si sumas a las calorías de una comilona las que conllevan postres demasiado calóricos, acabarás sufriendo importantes molestias. Después de una gran comida o cena, opta por un yogur desnatado o una gelatina. Y si estás tentada de un helado, debes saber que no ayudan en absoluto a bajar la comida y hacer la digestión. Da igual si los tomamos en copa, cucurucho o plato: su gran aporte calórico en grasas y azúcares, solo conducen al ardor, la pesadez y la indigestión.

Incluye probióticos

Los probióticos son microorganismos vivos, bacterias intestinales beneficiosas que ayudan a estimular tanto las enzimas naturales como los jugos digestivos, y hacen que nuestro estómago funcione correctamente. Además, nos protegen frente a bacterias malas y agresiones externas, por lo que es importantísimo que los incorpores en tus comidas al menos los días que no haya celebraciones. ¿Dónde los encuentras? En alimentos tan naturales como el yogur, el chocolate negro o los pepinillos.

Camina todos los días

Es muy probable que en estas fechas el tiempo no acompañe, pero intenta caminar al menos una hora al día, de esta manera mejorarás tu digestión y favorecerás el tránsito intestinal. Además, si no quieres ganar peso, caminar a paso ligero es una manera perfecta de quemar las calorías de más que dejan las navidades. También pequeños gestos como utilizar las escaleras en vez del ascensor te ayudarán a mantenerte.

Respira tranquilamente

Cuanto más oxígeno llegue a tu estómago, más trabajará y mejor será tu digestión. Por ello, antes de las comidas copiosas, haz unas cuantas respiraciones abdominales, vaciando completamente tus pulmones y volviéndolos a llenar. Para asegurarte de que lo haces correctamente, pon la mano sobre el estómago y mira cómo sube y baja.

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