Receta: Sardinas al horno

Resumen de la receta

Descubre la forma más clásica de preparar las sardinas, un pescado sabroso y lleno de omega 3.

El miércoles de ceniza se celebra en muchos lugares del mundo el popular entierro de la sardina. Un evento entroncado con la tradición pagana pero también con la cuaresma cristiana que, como tantos acontecimientos es complicado celebrar en pandemia. Pero hay una buena forma de celebrarlo en petit comité: preparando un plato con sardinas en casa.

Nosotros hemos decidido hacerle un homenaje a este humilde pescado dejándoos una receta de sardinas al horno, un plato tradicional y sabroso que además es muy fácil de preparar. Porque además tiene muy pocos ingredientes.

Nuestra receta tiene pocos secretos: solo hay que tener cuidado con que las sardinas estén bien limpias y tener un poco de paciencia al preparar el tomate. La salsa necesita su tiempo y cuidados: hay que vigilarla y darle vuelta de vez en cuando para que se haga de manera homogénea. Como veréis en el listado de ingredientes, hemos añadido un poco de azúcar. Nosotros la utilizamos para contrarrestar la acidez del tomate y que quede así una salsa un poco más suave que acompañe mejor al verdadero protagonista: el pescado.

Las sardinas, fuente de ácidos grasos

Quizá no las comemos tanto como deberíamos, pero las sardinas son una excelente forma de introducir en nuestra dieta los ácidos omega 3 y omega 6, que están presentes en este pequeño pescado. Estos ácidos son importantes para infinidad de procesos dentro de nuestro cuerpo, pero son de especial ayuda en el cerebro, el corazón o los riñones.

Las sardinas son considerados pescado azul, pero presentan una ventaja frente a otros peces que entrarían dentro de la misma categoría como el atún o el cazón: su tamaño. Y es que al ser más reducidas sus niveles de mercurio también son mucho menores, por lo que no representan en ningún caso, un riesgo para la salud.