Receta: Calamares a la plancha, algo más que un plato de verano

Resumen de la receta

Todos los trucos e ingredientes para elaborar unos calamares a la plancha dignos del mejor chiringuito de playa.

Los calamares son uno de esos productos que muchos asocian con las zonas costeras y con unas vacaciones en la playa, pero muchas veces no reparamos en que un producto tan sabroso y con una buena distribución en todo el territorio nacional no debería quedar relegado a ser el protagonista de las comidas más sabrosas del verano. Así que hoy os traemos una de las formas más sencillas y sin embargo más eficaces de prepararlos en casa, los calamares a la plancha.

A la sartén y (casi) listo

Solo necesitáis una buena sartén –mejor si es de las onduladas, en forma de parrilla- y un poco de mañana para limpiarlos bien. Aunque si tenéis un pescadero de esos de toda la vida que saben bien lo que se hacen, igual esto último no es necesario porque él os facilitará el trabajo.

Las cosas con las que tenéis que tener cuidado a la hora de elaborar este plato son, como decíamos, aseguraros de que los calamares estén bien limpios, porque así os evitaréis esas molestas arenillas que pueden destrozarte el disfrute de un plato (y si vienen mal dadas, igual hasta el esmalte dental). También evitar que se os vaya la mano con la sal. Para ello tenéis que pasar el calamar por la plancha y una vez esté hecho, si os parece que requiere de ella, añadirle un toque de sal.

El calamar, un alimento saludable

Aunque normalmente cuando pensamos en platos preparados con productos del mar solemos fijar la vista en los pescados blancos o azules, pero los cefalópodos -pulpo, sepia, calamar…- también están ahí y constituyen una buena forma de preparar una cena o un segundo plato saludable y además, poco calórico.

Porque tiene un alto contenido en proteínas pero también contiene hierro, potasio, magnesio y ácido fólico. Eso sí, a la hora de prepararlo hay que tener cuidado y no pasarse con las harinas si lo rebozamos o con el aceite, porque podemos añadir sin darnos cuenta esas calorías de más.