Francisco Rivera ha inculcado a sus tres hijos la pasión que siempre ha sentido por la Semana Santa sevillana. Su primogénita, Tana Rivera, fruto de su primer matrimonio con Eugenia Martínez de Irujo, vive con fervor estos días tan especiales. La joven no faltó este Viernes Santo al traslado de la Virgen de la Esperanza de Triana, un emotivo acto en el que no pudo reprimir las lágrimas.
![Tana Rivera, rota en lágrimas, en un emotivo acto de la Semana Santa](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1024 576"%3E%3C/svg%3E)
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La emoción embargó durante un momento a Tana Rivera y tuvo que recibir el consuelo por parte de uno de los miembros de la hermandad a la que también pertenece su progenitor. No pudo más que abrazarse a este mientras lloraba de forma desconsolada. La hija de Eugenia Martínez de Irujo se mostró muy sentida, como pocas veces la hemos visto, viviendo con pasión el instante en el que la Virgen de la Esperanza de Triana regresaba a la Capilla de los Marineros. Un acto que estuvo amenizado por la música de la banda María Santísima de la Victoria de Las Cigarreras.
Francisco y Tana Rivera, fieles a la Semana Santa
Tras dos años de ausencia debido a la pandemia, esta edición se ha vivido con mayor intensidad, si cabe, la Semana Santa sevillana. Francisco Rivera ha vuelto a salir a la calle para mostrar su fervor, una pasión que le viene de familia. Su madre, Carmina Ordóñez, no faltaba a la cita. Es miembro de la Hermandad de la Esperanza de Triana y nuevamente le hemos visto como costalero del Cristo de las Tres Caídas. Esta vez también se mostraba muy cómplice junto a su hijo pequeño, Curro, a quien está inculcando su fe desde la infancia.
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La familia de Francisco Rivera se ha dejado ver exprimiendo al máximo esta Semana Santa. El torero no faltó a las procesiones de un soleado Domingo de Ramos y lo hizo acompañado por su mujer, Lourdes Montes, y los dos hijos que tienen en común: Carmen y Curro. Entonces también estaba arropado por su primogénita. Un primer acto que marcaba el inicio de unos días que está viviendo con mucha pasión, también muy esperados, después de un tiempo complicado marcado por las restricciones que imponía la pandemia. El Jueves Santo se acercaba a la Hermandad de los Gitanos y allí protagonizaba un reencuentro con su exmujer, Eugenia Martínez de Irujo. Tana Rivera ha vivido la Semana Santa junto a su pareja, Manuel Vega. Una relación que se confirmó hace tan solo unos meses. El empresario hostelero parece haber encajado a la perfección en la familia a tenor por las imágenes que hemos visto de la pareja el pasado Jueves Santos. Y es que por primera durante estas fechas, el joven ha sido fotografiado junto a uno de las familias más célebres de nuestro país.