Tamara Falcó, Íñigo Onieva y Carolina Molas han encontrado el momento perfecto para disfrutar de una cita de tres en Bilbao, que ha supuesto la reconciliación entre Tamara y su suegra. La familia ha viajado hasta el norte de España por un motivo importante. La colaboradora de 'El Hormiguero' ha visitado el taller de 'Sophie et Voilà' para empezar con el diseño de su vestido de novia. Le han acompañado su novio y su suegra, con los que se reunía después de esta cita para celebrar el cumpleaños de la madre del empresario en Azurmendi, el estrella Michelín de Eneko Atxa.

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La celebración no ha tenido lugar en cualquier sitio. Tamara e Íñigo han reservado en uno de los mejores restaurantes del mundo y para ello han tenido que desembolsar una gran cantidad de dinero. Y es que tal y como detalla la página web del restaurante, Tamara, Íñigo y Carolina podrían haber pagado 600 euros por persona por un menú con maridaje gran selección. Los futuros marido y mujer son muy dados a hacer planes gastronómicos.

Un menú con vino por el que han podido pagar 600 euros

Tamara Falcó y su suegra, Carolina Molas, firman la paz con un menú de 600 euros por persona
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Han salido a comer a muchos estrellas Michelín durante los años que llevan saliendo juntos. Ya sea solos o con amigos. Ahora que ya están inmersos en los preparativos de su boda y que querían celebrar el cumpleaños de Carolina, la pareja ha aprovechado su visita a Bilbao para probar los increíbles platos de Eneko Atxa y así ver de cerca el increíble trabajo del chef.Los platos que podrían haber probado durante esta experiencia son las últimas creaciones de Eneko Atxa, que "adentran al comensal en una experiencia estacional para los cinco sentidos". Para empezar, la familia ha degustado el picnic de bienvenida, que lleva piquillo helado, brioche de salazones, tartar de berenjena y caldo de alubia. Luego pasa a varios platos con trufa: huevo trufado, merengue trufado y marianito. El siguiente paso lo llama 'El Invernadero', que lleva espárrago, manzana fermentada, huevas y queso carranza cara negra.

Para seguir con la experiencia gastronómica, Eneko Atxa termina con erizo de mar en texturas, ostra, granizado marino, algas y brotes, quisquillas y esencia de hierbas, guisante lágrima, gel de ibéricos y jugo de vainas fermentadas, bogavante asado y descascarillado sobre jugo de pimientos, atún a la brasa y caviar, Esencia del bosque, castañeta de cerdo ibérico, duxelle y trufa. Y para terminar, cuajada de hierbas, miel y mil flores y oliva negra y cacao.

La cocina de este chef "es un viaje en el tiempo, desde el ayer hacia el mañana, desde el amor por las tradiciones, la artesanía y lo contemporáneo, hacia un lugar llamado simplemente placer. Placer identitario", detallan en la página web de este restaurante. Tamara, Íñigo y Carolina han podido disfrutar de sus platos y también del buen vino. De hecho, esperaron a la sobremesa para hacerse una foto que guardarán para siempre en sus carretes y que ha supuesto la reconciliación entre ellas, que durante un tiempo estuvieron enemistadas por culpa de la infidelidad del empresario.

Un restaurante sostenible

Pero no solo es un lugar en el que se come increíble, también están instalados en un entorno espectacular, en medio de la naturaleza. Eso llevó al chef a construir un local sostenible. Azurmendi es el restaurante más sostenible según The World’s 50 Best Restaurants 2018. Esto les ha permitido ser reconocidos con un galardón del que presumen siempre. "Ubicado en Larrabetzu e integrado en la ladera de una colina plantada con viñedos autóctonos, Azurmendi es unedificio bioclimático singular. Es además un espacio integrado en la naturaleza que lo circunda, donde se conjuga el desarrollo sostenible y se trabaja la gastronomía como herencia recibida y derecho de las generaciones futuras", detallan en la página web.