Tamara Falcó ha presentado este miércoles su nueva colección de joyas para la firma Tous. Una colección inspirada en las figuras y formada por diez piezas: seis medallas, tres pulseras y un collar. La 'socialité' no puede estar más satisfecha de su trabajo, y así lo ha dejado constar en el lanzamiento de su nuevo trabajo. La suerte le sonríe en el terreno profesional. Y también en el personal. Porque a su felicidad al lado de Íñigo Onieva se suman grandes eventos familiares. Dentro de poco se celebrarán dos enlaces en el seno de su familia. En ambas se ha volcado de lleno en ayudar todo lo que puede, aunque se ha encontrado con algunas limitaciones...
Una de las bodas que tendrá lugar en el clan de Tamara es la de su primo, Álvaro Falcó, que dará el 'sí, quiero' a Isabelle Junot -hija de Philippe Junot, primer marido de Carolina de Mónaco- el próximo 2 de abril en el palacio de Mirabel en Plasencia. Lejos de lo que muchos esperaban, en este evento no colaborará con el catering. La hija del francés ha contado que le encantaría contar con Tamara en materia gastronómica, pero para el día que pase por el altar prefiere dejarlo todo en manos de los hermanos que están al frente del restaurante Coque: los hermanos Sandoval para que la ayuden con el banquete. Por tanto, la Marquesa del Griñón se ha limitado a echar una mano en otros menesteres. "Mi primo que es como un hermano, le he ayudado un poco con el tema del sacerdote, que es el padre Cruz", ha reconocido.
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Gtres
Aunque Tamara no aportará su sabiduría en materia culinaria en la boda de su primo, está contentísima. Hay otra boda a la vista. La de Álvaro Castillejo, sobrino de Isabel Preysler. "Cris es alucinante lo organizada que es y enseguida lo tenía todo planeado", ha comentado la colaboradora de ‘El Hormiguero‘.De su posible boda con Iñigo Onieva, la aristócrata prefiere esperar. No oculta que está enamorada y que siente que el joven es su media naranja: "Nos gustan las mismas cosas, nos gusta ir a restaurantes juntos. Él es muy familiar". No coinciden en todo, pero se ajustan. En materia religiosa, por ejemplo, "él está un poco más alejado", pero saben encontrar un término medio: "Yo voy a su discoteca y él viene a misa"."Es un momento súper bonito para conocerse... Poquito a poco", ha admitido Tamara. Todo parece indicar que ha encontrado en el diseñador de coches al hombre de su vida. Y poco le importan los rumores sobre las posibles infidelidades por parte del joven. Todo lo contrario. Más unidos y enamorados y que nunca se han dejado ver en las redes sociales disfrutando de un fin de semana recorriendo Cataluña en compañía de sus amigos en común.