Realmente chic en París

La semana pasada Letizia comenzó la semana en Suiza. Esta la inicia en París. Casi pareciera que tiene una desbocada agenda internacional, cuando lo cierto es que los Reyes llevan un año más bien escaso en salidas al extranjero, con la cancelación de varias citas importantes además (Reino Unido y Japón, entre otras). Bueno, pues hoy ha tocado un desplazamiento cercano y para participar en la apertura del Congreso Mundial del Cáncer 2016, donde además ha pronunciado unas palabras (in english).

A su llegada, Letizia llevaba puesta una nueva capa en blanco roto, o gris piedra quizás, de Hugo Boss. Idéntica a otra que tiene en negro. Pero poco le ha durado y es entonces cuando ha descubierto su look.

Siempre que hablamos de París, nos vienen a la mente palabras como chic, savoir faire y demás. Después de la tormenta del chándal, no puedo más que rendirme, y si la última vez la cosa fue negra (o azul oscuro más bien) hoy viene negra de nuevo, pero en plan muy bien. Negro para un acto de noche (comenzaba a las 19:00 horas), de enjundia, y al que previsiblemente seguía una cena en algún lugar encantador de la capital gala.

Como podéis ver, Letizia se ha puesto un mono de tipo esmoquin, sin mangas, pero que a simple vista parece elegantísimo. En cualquier caso, lo que veo ya me gusta. Y mucho. Un esmoquin nunca falla y a ella (que tiene varios en distintas versiones) le sientan de maravilla.

Despejando las dudas: es el modelo Duxida de Hugo Boss (¡bravo, Bea!) y cuesta 579 euros. Esos vivos satinados en el cuello y en la cintura aportan charme a una prenda que tiene pinta de comodísima. Por cierto, llevaba también sus salones negros de Prada.

De lo demás, ha lucido su cartera con cordón dorado de Nina Ricci, que es una de las más bonitas que atesora. Y como joyas, los pendientes de pepitas doradas de Tous. Nada más. ¿Alguna pulserita en falta quizás? Letizia no es demasiado amiga de estos complementos. El moño y un maquillaje excelente han hecho el resto.

Chicas y chicos, a la Reina lo que es de la Reina. Hoy esta muy muy guapa. Moderna y chic. París le sienta bien, y aunque es probable que se pierda el 11º cumpleaños de su hija mayor, Leonor (si no regresa a tiempo antes de medianoche, una hora bruja por excelencia, por aquello de Halloween, aunque en España seamos más del Día de Todos los Santos), seguro que mañana la Princesa tendrá su gran día.

Espero vuestras sinceras y respetuosas opiniones. Por cierto, doy la bienvenida a los muchos comentaristas que se han incorporado a nuestro saloncito... Adelante...