Ortega Cano ha recibido el alta médica y podría entrar pronto en prisión
El torero no está pasando precisamente por sus mejores momentos. A su situación judicial se une la de su hijo José Fernando, que continúa en la cárcel, y además sus problemas de salud. José Ortega Cano tuvo que ser operado del corazón el pasado 27 de diciembre, justo el día que cumplía 60 años y que, por si fuera poco, debía ingresar en prisión para cumplir su condena de dos años y medio por el accidente de tráfico ocurrido en Castilblanco de los Arroyos, en el que murió Carlos Parra. El diestro fue condenado por un delito contra la seguridad vial por conducir bajo los efectos del alcohol.
El diestro salió bien de la intervención, que había sido programada con anterioridad, que fue realizada ayer en la clínica Ruber Internacional de Madrid y en la que se le practicó un by-pass para corregir un problema coronario. Finalmente no tuvieron que implantarle un marcapasos, ya que solo tenía una pequeña obstrucción en una de las arterias.
El diestro, el pasado marzo, durante el juicio por homicidio imprudente tras el accidente de tráfico de 2011.
Esta operación ha retrasado su ingreso en la cárcel, en Sevilla. De hecho, algunas voces han mantenido que era una maniobra para ganar tiempo, aunque, como hemos dicho, era una intervención ya programada. Lo que sí ha hecho la defensa de Ortega Cano es formalizar ya una petición de indulto, que ha presentado ante el Juzgado de lo Penal número 6 de Sevilla.
Se da la circunstancia de que su hijo José Fernando sigue en Sevilla 1 en régimen de prisión preventiva, comunicada y sin fianza, desde el pasado 14 de noviembre, cuando fue detenido junto a otros cuatro amigos por seis delitos, entre ellos la supuesta agresión y robo con violencia a un ciudadano a las puertas de un local de alterne en la localidad hispalense de Castilleja de la Cuesta. La Fiscalía pide cinco años de cárcel para el joven. Ortega Cano deberá ingresar en Sevilla 2. Padre e hijo podrían coincidir entre rejas al mismo tiempo.