Los reyes de Holanda recibieron a Hollande en el palacio de Noordeine, en La Haya y más tarde mantuvieron una audiencia con él en una de los salones de palacio.

La reina Máxima nuevamente volvió a dar una lección de estilo, ataviada con un vestido azul cielo con mangas de trompeta. Máxima, remataba su look con sombrero tipo casquete, guantes y cartera de mano. Fiel a su costumbre de llevar bastantes joyas en sus apariciones públicas, esta vez optó por una pulsera de brillantes que lleva a menudo y broche y pendientes de aguamarina.

La Reina Máxima va ganando en elegancia en cada una de sus apariciones públicas, con un estilo regio y sobrio pero en el que no falta nunca el color y ciertas dosis de atrevimiento. Un vestuario de auténtica reina.

Los reyes de Holanda, en el aeropuerto recibiendo a Hollande

La reina Máxima, elegantísima de azul, y delante el presidente Francois Hollande, que acudió en solitario a La Haya

Máxima, de azul y con mangas de trompeta, tiene el mismo vestido también en rojo

La reina Máxima de espaldas. Esta vez optó por lucir unos zapatos en tono dorado y con el talón descubierto.

Los reyes de Holanda, en una de las salas del palacio de La Haya, con Francois Hollande