La periodista de informativos de Tele 5 disfruta de su mejor momento. Hoy cumple 30 años, justo cuando también hace un mes que fue madre por primera vez. La llegada de Martín a su vida ha supuesto toda una revolución. Lógicamente su situación familiar ha cambiado; ahora todo su tiempo lo ocupa el pequeño, fruto de su relación con Iker Casillas, portero del Real Madrid. Pero hay más novedades.

Y es que Sara Carbonero parece otra. Su actitud, al menos de puertas para afuera, también es distinta. Muchos compañeros suyos de cadena coinciden en afirmar que, desde que se quedó embarazada, la joven toledana fue mostrándose más accesible y amable, encantada de que le preguntasen y felicitasen por la excelente noticia.

Comenzó el año, el pasado 3 de enero, recibiendo a su hijo, que nació por cesárea en la clínica Ruber Internacional. Unos días más tarde, Sara Carbonero e Iker Casillas abandonaban el centro con su pequeño en brazos (ver NOTICIA AQUÍ), posando como cualquier pareja encantada de estrenar paternidad. Desde entonces, la periodista se ha dedicado en exclusiva a cuidar a su bebé y, lejos de mantenerse oculta, ha ido manteniendo al tanto de sus sensaciones y experiencias a sus seguidores. Para ello, su blog, Cuando nadie me ve, le ha servido de excelente herramienta. 

Sara e Iker Casillas, posando encantados como felices padres.

Sara Carbonero presume de su bebé en las redes sociales. En su primera aparición con su bebé tras su presentación, subió una foto de ella y su hijo tranquilamente en casa (VER AQUÍ). Como ella misma asegura, está en un proceso de "aprendizaje intensivo" con su hijo, sin eludir las lógicas dudas y contratiempos como mamá, entre los que se encuentra la falta de sueño.

Además, comparte las fotos con los muchos regalos que amigos y desconocidos le envían, incluso cosas más íntimas o tiernas como los patucos hechos por las bisabuelas del niño... "La llegada de un bebé te cambia la vida por completo. De repente, en tu vida hay un motivo de peso para sonreír todos los días", cuenta en su blog. Sara está mostrando su faceta más dulce, y parece encantada con ello.

En esta nueva estrategia, podríamos decir, hay quien asegura que existe cierta premeditación. Esta teoría se apoya en el hecho de que la periodista cambió de representante a finales del año pasado, cuya labor parece que tiene como objetivo dar la vuelta a la imagen más fría y distante que tenía la periodista, algo que quizás podía confundirse con su actitud discreta. El hecho es que esta nueva Sara Carbonero no tiene nada de fría: está radiante, feliz, disfrutando de Martín, enamorada de Iker, y con todas las ilusiones puestas en el presente y en el futuro. 

Sara colgó esta imagen suya con Martín en el sofá de su casa.

 

Sonriente, el pasado diciembre, a punto de dar a luz saliendo de un restaurante.