Hollywood llora la muerte por sobredosis del actor Philip Seymour Hoffman
Hace dos semanas, aparecía sonriente en el Festival de Cine de Sundance, donde presentaba dos películas. Nada hacía presagiar que esa sería la última aparición pública de Philip Seymour Hoffman. El actor, de 46 años, fue encontrado este domingo en su apartamente de Nueva York con una jeringuilla clavada en el brazo y sus compañeros de Hollywood aún no se lo creen. Las reacciones no se hicieron esperar y fueron muchos los que compartieron en las redes sociales su estupor
"No hay palabras. Es sencillamente terrible", dijo George Clooney, que dirigió a Hoffman en Los idus de marzo en 2011.
"Un hombre verdaderamente amable y maravilloso y uno de los mejores actores de la historia",escribió Mia Farrow en su Twitter.
"Querido Philip, un alma hermosa, hermosa. Para los más sensibles entre nosotros el ruido puede ser demasiado. Bendito sea tu corazón", fueron las palabras de Jim Carrey.
"No fue sólo un genio como actor sino un hombre generoso", afirmó Andie MacDowell.
"Noticia triste e impactante. Descanse en paz Philip Seymour Hoffman, uno de los más grandes actores de una generación, además de un hombre dulce, divertido y humlide", dijo el cómico Ricky Gervais.
"Impactado y con el corazón roto. Qué gran pérdida", declaró Elijah Wood .
La familia de Philip Seymour Hoffman emitió un breve comunicado: "Estamos devastados por la pérdida de nuestro querido Phil y apreciamos las muestras efusivas de amor y apoyo que hemos recibido de todos. Esta es una pérdida trágica y repentina, y les pedimos que respeten nuestra privacidad durante este tiempo de duelo. Por favor, tengan a Phil en sus pensamientos y oraciones".
El cadáver de Hoffman es sacado de su apartamento de Nueva York
El actor era también director artístico junto con John Ortiz de la Labyrinth Theatre Company neoyorquina, donde conoció a su pareja durante 15 años, la diseñadora de vestuario Mimi O'Donnell, con quien tuvo tres hijos. Philip y Mimi se separaron este otoño.
Hoffman tenía que haber ido a buscar a sus tres hijos a las nueve de la mañana del domingo para ir visitar a un amigo, el guionista David Katz. Y cuando no apareció ni contestó al teléfono, Katz se acercó hasta su casa, en el 35 de la calle Bethune, en el West Village. Fue entonces cuando lo encontró muerto en el baño a consecuencia de una sobredosis.
Con William Dafoe, Rachel McAdams y el resto del equipo de su último trabajo, A Most Wanted Man, que presentó en Sundance.
Su círculo más cercano está muy afectado, porque estaban convencidos de que Hoffman había superado sus problemas con las drogas. De hecho, el pasado verano confesó haber "metido la pata", tras una recaída después de de 23 años "limpio", recordando su salvaje juventud donde el alcohol y las drogas eran parte fundamental de su vida y explicando que había dejado todo eso de lado porque tenía miedo a morir.
Para explicar porqué había vuelto a reacer tras más de dos décadas, el actor dijo que había empezado a abusar de los calmantes y de ahí pasó a esnifar cocaína, por lo que decidió ingresar voluntariamente en una clínica de Nueva York, donde permaneció durante 10 días.
Los protagonistas de Los juegos del hambre, que todavía podemos ver en los cines.
Ganador de un Oscar por Capote en 2006, Philip Seymour Hoffman estuvo nominado también por La guerra de Charlie Wilson, La duda y The Master. Sus últimos trabajos fueron El último concierto y Los juegos del hambre: en llamas, la segunda trilogía del best seller juvenil protagonizado por Jennifer Lawrence.
En 2006 ganó el Oscar al mejor actor por Capote; Reese Whiterspoon por En la cuerda floja.