La infanta Cristina lo tiene claro. A pesar de la condena de más de 5 años que se le ha impuesto a su marido en España y por la que tendrá que entrar en prisión en menos de cinco días (la fecha límite es el lunes 18 de junio), la hermana del rey Felipe VI continuará viviendo en Ginebra, a donde se trasladó cuando saltó el escándalo del caso Nóos.
El motivo de la decisión de la infanta Cristina radica en la educación de sus hijos. Estos han estado acudiendo a un colegio de élite de la zona, el l'Ecole Internationale de la Route de Chêne de Ginebra, desde que trasladaran su vida junto a sus padres a esta ciudad.
La infanta Cristina desea que sus dos hijos menores, Irene (13 años) y Miguel (16 años) continúen los cursos restantes en este exclusivo centro. En el caso de su hijo Valentín (18 años), ya terminó sus estudios escolares hace un año, y Pablo Nicolás (17 años), se encuentra cursando el último mes.
30.000 euros al año por alumno
Lo último que desea la infanta es interrumpir el curso y el futuro escolar de sus hijos. Mantenerlos en este exclusivo centro que además se encuentra ubicado muy cerca del domicilio familiar, es su prioridad, por encima de las circunstancias de Iñaki Urdangarin.
Este colegio suizo es uno de los más destacados de la zona. El coste que deberán desembolsar los padres que quieran que un hijo suyo estudie allí, asciende a más de 30.000 euros anuales si se incluye la comida, material escolar o actividades extraescolares.
Se trata de un colegio bilingüe, un requisito que para la infanta Cristina fue fundamental a la hora de elegir centro escolar para sus hijos.
Durante los cuatro años que los hijos de la infanta Cristina han estudiado en este centro, ha sido el rey Juan Carlos quien se ha encargado del pago.
Se quedará en Suiza
La infanta Cristina lo tiene claro. A pesar de la condena de más de 5 años que se le ha impuesto a su marido en España y por la que tendrá que entrar en prisión en menos de cinco días (la fecha límite es el lunes 18 de junio), la hermana del rey Felipe VI continuará viviendo en Ginebra, a donde se trasladó cuando saltó el escándalo del caso Nóos.
Preocupada por sus hijos
El motivo de la decisión de la infanta Cristina radica en la educación de sus hijos.
Educados en un colegio de élite
Estos han estado acudiendo a un colegio de élite de la zona, el l'Ecole Internationale de la Route de Chêne de Ginebra, desde que trasladaran su vida junto a sus padres a esta ciudad.
La situación escolar de sus hijos
Cristina desea que sus dos hijos menores, Irene (13 años) y Miguel (16 años) continúen los cursos restantes en este exclusivo centro. En el caso de su hijo Valentín (18 años), ya terminó sus estudios escolares hace un año, y Pablo Nicolás (17 años), se encuentra cursando el último mes.
Su prioridad
Lo último que desea la infanta es interrumpir el curso y el futuro escolar de sus hijos. Mantenerlos en este exclusivo centro que además se encuentra ubicado muy cerca del domicilio familiar, es su prioridad, por encima de las circunstancias de Iñaki Urdangarín.
l’Ecole Internationale de la Route de Chêne
Este colegio suizo es uno de los más destacados de la zona.
30.000 euros anuales
El coste que deberán desembolsar los padres que quieran que un hijo suyo estudie allí, asciende a más de 30.000 euros anuales si se incluye la comida, material escolar o actividades extraescolares.
Lo eligió ella misma
Se trata de un colegio bilingüe, un requisito que para la infanta Cristina fue fundamental a la hora de elegir centro escolar para sus hijos.
Financiado por Don Juan Carlos
Durante los cuatro años que los hijos de la infanta Cristina han estudiado en este centro, ha sido el rey Juan Carlos quien se ha encargado del pago.