Los Reyes Guillermo y Máxima, que siempre apoyan las iniciativas para mejorar el medio ambiente, visitaron la isla de Samso, pionera en poner en marcha las energías renovables. Estuvieron acompañados por los herederos, Federico y Mary con quienes viajaron a la isla en ferry. Máxima, que lució un vestido abrigo de Claes Iversen, y Mary, que se protegió del viento con una capa, coincidieron en llevar unos favorecedores sombreros tipo borsalino.
En su visita a la isla de Samso, Máxima de Holanda y Mary Donaldson ofrecieron su mejor imagen casual.
en Samso, Guillermo y Máxima, siempre acompañados por Federico y Mary, visitaron un colegio y degustaron las especialidades locales en el restaurante Walthers. Después regresaron a Copenhague donde esa noche, los reyes de Holanda ofrecieron una recepción a sus anfitriones en la que las royals volvieron a brillar.
Mientras Máxima eligió un vestido rojo, un color que que le favorece mucho, Mary optó por un palabra de honor negro, un color que no suele utilizar mucho.
Máxima lució un espectacular juego de diamantes, en tanto que Mary optó por unos vistosos pendientes de artesanía.
Guillermo y Máxima se encargaron de recibir a los miembros de la Familia Real danesa a la recepción en la Biblioteca Real de Copenhague, donde tuvo lugar una cena seguida por un espectáculo titulado «La Noche de la Cultura holandesa». Fue el broche perfecto a un viaje de Estado marcado por las cariñosas relaciones entre ambas casas reales.
Guillermo y Máxima con la reina Margarita de Dinamarca y el príncipe Henrik.
Los Soberanos holandeses con el príncipe Joaquín de Dinamarca y su esposa, la princesa Marie.
