Los secretos de la estilista de Meghan Markle para su boda con Harry

De todos es sabido que casi todas las celebrities cuentan con los servicios de un estilista profesional para vestirlas en sus muchos eventos: estrenos, fiestas, cenas, galas de premios... Si una famosa brilla en la alfombra roja, seguramente sea porque hay otra persona detrás que se ocupa de seleccionar para ella los trajes más oportunos, los detalles más a la moda y las combinaciones más acertadas.

Ese es el caso de Meghan Markle, ya exactriz de profesión, que el próximo 19 de mayo se convertirá en la esposa del príncipe Harry de Inglaterra. Hasta su compromiso, la estadounidense también tenía esa persona de confianza, y era Jessica Mulroney, quien además es una de sus íntimas amigas. Esta mujer es una reconocida estilista canadiense, experta en bodas y moda nupcial para ser más concretos. El pasado 10 de enero se la vio entrar en el palacio de Kensington, y las alarmas saltaron. ¿Está ayudando a Meghan a elegir o a pulir los detalles de su vestido de novia? De momento, vamos a conocerla un poco mejor y a encontrar ciertas pistas...

Prometida

El pasado 27 de noviembre al fin se confirmaron los insistentes rumores y Harry de Inglaterra y Meghan Markle anunciaron su compromiso. Ese mismo día la pareja aparecía enamoradísima ante los medios. El look de la actriz fue analizado a fondo, llamando mucho la atención el abrigo blanco que escogió, de la firma canadiense Line The Label. ¿Y quién estaba detrás de este estilismo histórico?

Jessica Mulroney

Pues Jessica Mulroney, nacida Brownstein, una estilista establecida en Toronto, que además se gana la vida (y muy bien) como experta en bodas y moda nupcial y también relaciones públicas. Meghan y ella se conocen desde hace años, cuando la joven se mudó a Toronto para trabajar en la serie Suits. Se dice que les unió su pasión por el deporte y el yoga...

Amigas íntimas

Desde el principio conectaron y es habitual, o era, que Jessica le dedicase todo tipo de elogios a su gran amiga y subieran fotos juntas en sus redes sociales. Ahora que le espera otro papel, Meghan ha cerrado las suyas. 

Poderosa mujer de familia

Jessica tiene 37 años y está casada con Ben Mulroney, un conocido presentador de televisión canadiense, hijo del exp Primer Ministro Brian Mulroney, con el que tiene tres hijos: los gemelos Brian y John, de siete años, e Isabel, de cuatro. La pequeña ya suena como una de las niñas que participen como damitas en la boda de Harry y Meghan, pues esta la adora. 

La Primera Dama de Canadá, su clienta

Jessica Mulroney es una reconocida profesional en su terreno. De hecho, también se ocupa de los mejores estilismos de Sophie Trudeau, la esposa del Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau. Aquí las vemos juntas y sonrientes en una gala. 

Primera aparición

Solo tres días después del anuncio de compromiso, Harry y Meghan aparecieron por primera vez juntos en un acto oficial. Fue en Nottingham, y de nuevo todas las miradas se posaron en ella. Otro abrigo, pero de corte militar azul marino, le sirvió para ir estilosa sin pasar frío. 

Misión: superar a Kate

En la tradicional jornada navideña en Sandringham, que Meghan compartió con el resto de la Familia Real británica, la exactriz destacó luciendo otro abrigo con gran cuello y un tocado, todo en tonos tierra. Sin embargo, no pudo eclipsar a Kate, su encantadora futura cuñada, a quien tiene muy difícil superar. De momento, va paso a paso. 

Visita a Kensington

Aunque los preparativos marchan con el mayor secretismo, ya tenemos algunas pistas sobre la gran incógnita: el vestido de novia. Jessica fue vista el pasado 10 de enero entrando en el complejo palaciego de Kensington, donde se asegura que está llevando a cabo las pruebas del futuro modelo. La estilista ya ayudó a Meghan a elegir para ella el vestido nupcial que se puso para su boda en la ficción en Suits. 

De confianza

La boda será el gran momento de Meghan Markle, tras la cual ingresará por la puerta grande en la realeza británica. Su vestido debe escogerse con mucho mimo, y no caer en el error que supuso el demasiado glamouroso vestido con transparencias que lució en el posado oficial del compromiso. Para ello Jessica es la persona idónea y en la que más confía. 

De “luna de miel”

En agosto de 2016 Meghan se rodeó de un reducido grupo de amigos para viajar por Europa. Entre ellos estaba Jessica Mulroney, con quien la vemos tomando el sol en Italia. La estilista aseguraba, con mucho humor, que estaban "de luna de miel". 

Viajes

Las dos también posaron así de felices en Positano, el precioso enclave turístico del sur de Italia. Luego irían a la isla de Capri, y después vendrían a Madrid. 

Labor filantrópica

No solo comparten su visión de la moda, que es moderna y chic, no exenta de un toque Hollywood. Otra faceta muy importante para ambas es la filantropía. Jessica cofundó con sus tres cuñadas The Shoebox Project, una iniciativa que promueve la distribución de cajas con cosméticos y productos de baño destinados a mujeres que viven en la pobreza. Algo en lo que Meghan la ha apoyado sin fisuras. 

Una princesa moderna

Cuando acudió a Cardiff causó sensación con su maravilloso abrigo negro con lazo de Stella McCartney y un bolso verde de la firma DeMellier, diseñado por la española Mireia Llusia-Lindh. La labor de Jessica Mulroney suele inclinarse por favorecer las firmas canadienses, como Aritizia y Mackage, que gracias al escaparate que supone que se lo ponga Meghan, están teniendo una enorme proyección en el mundo.

Rompiendo moldes

Y para asistir a la gala de los Endeavour Awards, su primera cita de "alfombra roja", no optó por un tradicional modelo de falda o vestido, sino con un traje sastre en blanco y negro de inspiración masculina. Era de Alexander McQueen. Parece que Meghan está sentando las bases de su propio estilo de princesa. 

Inseparables

Jessica y Meghan forman un buen tándem. Esta foto es una buena muestra de su complicidad. La estilista la definió hace un tiempo así: "Es la jefa y yo la adoro". Seguro que es una de las invitadas cuando dé el "sí, quiero" el próximo 19 de de mayo, en la Capilla de San Jorge del Castillo de Windsor.