Aunque la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin han intentado mantener la máxima discreción sobre su llegada a la Ciudad Condal, finalmente ayer fueron vistos merendando juntos en una cafetería cercana al hotel donde se alojan, pues los duques de Palma no ocuparon su palacete de Pedralbes, que continúa en venta. La infanta mantiene largas reuniones con sus abogados en las que los letrados hacen una simulación del interrogatorio al que se enfrentará Cristina el sábado cuando comparezca ante el juez Castro y deba responder también a las preguntas de la fiscalía, de Manos Limpias y el Foro Cívico Julio Anguita.

Iñaki no separa de Cristina en estos momentos tan difíciles para ellos y para la Corona.

Los abogados de la infanta han manifestado que la duquesa de Palma se encuentra tranquila y serena y con la confianza de que, tras su comparecencia, se demostrará su inocencia. también se ha sabido que la hija de los reyes no pernoctará en el palacio de Marivent, residencia de la Familia Real en Mallorca, sino que volará a Palma directamente desde Barcelona.  Esa mañana del 8 de febrero se desvelará también si la duquesa de Palma llega en coche hasta la puerta de los juzgados o hace el paseíllo.