Charlène de Mónaco reaparece, desafiante y guerrera, en su foto más extraña

La princesa Charlène de Mónaco ha vuelto a la palestra. Y de una forma que no sospechábamos. Recordemos que la esposa del príncipe Alberto se encuentra en Sudáfrica desde el pasado mes de mayo, donde tras cumplir con unos compromisos en la lucha contra la caza de los rinocerontes, la joven contrajo una infección respiratoria y de oídos que acabó complicándose. Hasta el punto de que ha necesitado de varias intervenciones y aún no ha podido regresar a casa, pues los médicos le impiden tomar un avión debido a la presión.

Recientemente, y ante los incesantes rumores de crisis matrimonial, la propia princesa aseguraba que aún tendrá que quedarse en Sudáfrica hasta, al menos, el próximo octubre. La enfermedad y la separación de su familia, sobre todo de sus hijos pequeños, los mellizos Jacques y Gabriella, de seis años, no está siendo nada fácil. Dice echarlos mucho de menos, pero que cuenta con el apoyo total de su marido. Y palía la presencia física con videollamadas con sus niños, aunque lógicamente no sea lo mismo que poder abrazarlos y estar en su día a día.

Durante todo este tiempo apenas han llegado imágenes nuevas de Charlène. Una durante el cumpleaños de una sobrina, junto a Alberto y sus hijos, en la que ha sido hasta la fecha su única visita a la princesa; otra mientras hablaba con sus hijos por teléfono...

Ahora ella misma ha compartido una nueva fotografía. Una potente imagen en blanco y negro, en la que Charlène, con su pelo corto y rapado por los lados, va ataviada con un collar de estilo africano y luce un atrevido maquillaje con una marcada banda oscura en los ojos. Un look de inspiración tribal que ha llamado mucho la atención.

Por otro lado, la princesa posa con mucha actitud, señalando a la cámara con el índice de la mano izquierda y con el puño de la derecha apoyado en la nariz: "El cuerno del rinoceronte no es 'cool'", escribe en el mensaje que ha compartido en sus redes sociales. Otra de las fotos que ha subido es la misma foto, pero en negativo, y este lema escrito con letras rojo sangre.

El posado forma parte de la campaña que apoya en defensa de estos animales salvajes, bajo la etiqueta de #ChasingZero, caza cero. Charlène anima a participar y donar dinero para esta iniciativa "para acabar con las atrocidades que ponen nuestra preciosa vida salvaje en peligro".

Charlène de Mónaco ha asegurado que se encuentra "bien", pero todavía tiene que cuidarse mucho e incluso someterse a algún otro tratamiento. En sus declaraciones más recientes también se lamentaba de no poder celebrar con su marido su décimo aniversario de boda, que tuvo lugar el pasado 1 de julio. "Alberto es el principal pilar de mi vida y mi fuerza. Sin su amor y apoyo no habría podido superar este momento tan doloroso", cuenta.