Alberto y Charlene de Mónaco se han convertido un año más en los anfitriones del Baile de la Cruz Roja, que ha celebrado este viernes su 70º aniversario. Charlene de Mónaco ha acaparado todas las miradas en la sala des Etoiles, donde se ha celebrado esta gala benéfica, que recauda cada año dinero para los más necesitados.
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La princesa llamó la atención al aparecer con un espectacular vestido de pedrería de la firma Versace en corte de sirena y un impresionante escote, tanto por delante como por detrás, que no pasó desapercibido. El diseño elegido resaltaba su figura atlética, y no dudó en acompañarlo con unos complementos de lo más vistosos.
Charlene combinó este vestido con un bolso metalizado, pendientes plateados y una pulsera de diamantes. El maquillaje era sencillo y natural, pero sorprendió con unos ojos maquillados con sombras metalizadas.
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Un vestido espectacular con tonos metalizados
Bolso metálico y pulsera de diamantes
En esta cita se han dado lugar también otros rostros conocidos como el cantante Seal, el trío de música MamaDear y la Mack Mackenzie Band. Alberto y Charlene de Mónaco se dejaron ver en el centro de la pista de baile, muy cómplices. Los invitados a esta gala benéfica tuvieron que pagar unos 1.200 euros para poder ser testigos de lo que ocurría en la sala des Etoiles.
Un escote que no pasó desapercibido
Una cita solidaria a la que no faltan nunca
Charlene de Mónaco se convirtió en el centro de atención a su llegada
Maquillaje natural con sombras metalizadas
El escote de atrás, de lo más original