La Reina Letizia está muy implicada en cuestiones humanitarias. Quizás por eso laAsociación Nacional de Hipertensión Pulmonar pensó en ella para intentar que intercediese en el caso Ablaye Mboup. Hablamos del hombre senegalés de 59 años que vive en Fuengirola y que tiene una enfermedad rara, de hecho, solo 15 personas de cada millón sufren su misma dolencia: hipertensión arterial pulmonar. Actualmente está ingresado en el Hospital Costa del Sol de Marbella, donde recibe cuidados paliativos y donde luchan por acompañarle en esta última etapa. Y es que en España vive sin la compañía de su familia, siendo precisamente este el motivo por el que han escrito a doña Letizia. La misiva fue enviada hace ya algunos días y la Casa Real respondió, tal y como confirma esta asociación a SEMANA.

Letizia
Gtres

En la mencionada carta se explican todos los trámites que se han hecho para que el hijo de Ablaye pueda despedirse de su padre, un proceso que se ha alargado mucho más de lo esperado. La situación es extrema y querían gastar el cartucho de pedirle a la Reina que les tendiera su mano: "Le mandamos la carta hace ya algunos días y sí ha habido respuesta". Aunque prefieren no desvelar el mensaje que les ha hecho llegar la Reina, nos confirman la excelente noticia de que Ablaye cumplirá su sueño. "Ya tenemos el visado y el niño ya tiene su billete. Ha sido tremendo, todo el mundo se ha volcado", nos aseguran a esta revista, una lucha que no han cejado y que, por fin, ha dado sus frutos.

"Sabemos de la implicación de Su Majestad con las causas humanitarias y la estrecha vinculación con las enfermedades raras, por lo que recurrimos desesperadamente a su apelación como última opción de poder ofrecerle a Ablaye una muerte humanizada al lado de su hijo", decían en esta carta que ya copa titulares. Tras mucho batallarlo y no rendirse, han logrado que el hijo de este hombre senegalés pueda despedirse de su progenitor y, además, han ayudado a que tenga una muerte digna.

Reina Letizia
Change.org

En este texto cargado de sentimiento, intentaban que Ablaye tuviera el apoyo de su familia más directa y han luchado durante casi seis meses para que fuera posible. "Para Ablaye, el impacto de la enfermedad ha sido muy grande, ya que no solo ha tenido que aceptar y asumir que padece una enfermedad rara y sin cura, sino que, además, no ha tenido el soporte emocional de la familia, en especial de sus hijos, que residen en Senegal", decían sobre esta situación tan complicada. Además, iniciaron una petición de firmas en change.org con el fin de conseguir un visado urgente "ya que le quedaban días de vida y quería despedirse de él". Ha sido ahora cuando se confirma que su deseo se hará realidad.