El príncipe Harry y Meghan Markle son protagonistas de un accidente de tráfico múltiple en Nueva York. La pareja acudía junto a la madre de esta, Doria Ragland, en uno de sus coches cuando los paparrazis les perseguían para obtener diversas fotografías. Más de dos horas duró la "persecución casi catastrófica" que terminó con la colisión de otros coches que circulaban en esos momentos. También estaban involucrados varios peatones y actuaron diversos oficiales de la NYPD, el departamento de policía de la ciudad. La actriz recibió un premio de la mano de la Foundation for Women en la noche del pasado martes y se montaban en un taxi para marcharse al terminar. Al comenzar su camino por las calles neoyorkinas se veían en medio de una persecución protagonizada por los coches de los paparazzis que les esperaban. Una situación que a muchos les puede recordar a la que sufrió Lady Di, su madre. La princesa de Gales falleció por las heridas que le generó un accidente automovilístico en Francia tras una peligrosa huida de algunos fotógrafos.

Harry y Meghan Markle, involucrados en una "persecución casi catastrófica" por los paparazzis
Foto: GTRES

Los más de doce vehículos con las ventanas tintadas y oscurecidas perseguían a los Duques de Sussex. En palabras del portavoz del propio Príncipe Harry, no pararon hasta obtener unas imágenes que "fomentan una práctica altamente intrusiva que es peligrosa". Reuters asegura que tanto la pareja como sus acompañantes salieron ilesos. Se encuentran "conmocionados con lo sucedido" después de que, incluso, los coches que les perseguían se subieran a las aceras. Las informaciones señalan a que se cometieron por parte de estos perseguidores temeridades como saltarse los semáforos, retroceder en calles de un sentido entre otras.

Estos medios británicos apuntan que llegaron, incluso, a activar sus cámaras y fotografiar a Harry y Meghan Markle en plena conducción o bloquear otros vehículos que se encontraban circulando. La policía llegó a intentar impedir que continuaran en esta "carrera", pero las órdenes habrían sido ignoradas.  Al ver todo lo que se estaba generando, explican también, pararon y tuvieron a las cámaras rápidamente encima. Como viven en California, en la exclusiva zona de Montecito, en su viaje a Nueva York se hospedaron en una residencia privada de unos conocidos a la que decidieron no ir para no "comprometer su seguridad".

Harry y Meghan Markle, involucrados en una "persecución casi catastrófica" por los paparazzis
Foto: GTRES

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Harry siempre se ha mostrado contrario a la prensa y su forma de actuar tras los continuos incidentes con la Familia Real Británica. Como se menciona en el primer párrafo, han vivido en primera persona las consecuencias devastadoras que estas persecuciones pueden generar. Diana de Gales, su madre, falleció en agosto de 1997 tras sufrir un grave accidente de tráfico. Unos fotógrafos iniciaron una persecución por carretera al coche en el que viajaba ella y otras tres personas, incluida Dodi Al-Fayed. En el túnel del Alma en París, el coche en el que viajaban perdió el control y terminó en un grave accidente. Siempre ha buscado que no se repita la misma historia y ahora, a cientos de kilómetros de Reino Unido, se ha visto en una situación igual de comprometida para su seguridad. 

Su vida en Estados Unidos no es tranquila en cuanto a los medios se trata. En el 2020 ya denunciaron frente a las fuerzas de seguridad el acoso que sufrían en una casa que tenían en Los Ángeles tras darse cuenta de la presencia de varios drones sobrevolando la propiedad. En la actualidad se encuentra en plena batalla judicial contra la Associated Newspapers Limited, la editora tras el diario inglés Daily Mail por "violación de su privacidad". Aparecía el pasado marzo en Londres para personarse en la audiencia preliminar en esta demanda. Le acompañaron otros rostros famosos, que también se sienten víctimas de estos tabloides. Los abogados que asistieron confirmaron que seguirá todo adelante. Habría "pruebas convincentes y muy preocupantes de que han sido víctimas de horribles actividades delictivas y violaciones graves de la privacidad".