Estamos ante un raro caso de agenda oficial de la realeza. Un compromiso que no se rige por el protocolo estricto, que no es una gala ni una reunión de trabajo. Es otra cosa. Y nos ha dejado totalmente encandilados. Para eso nos hemos ido a Luxemburgo, donde sus príncipes herederos, Guillermo y Stéphanie, reaparecieron con su hijo, el príncipe Charles, y allí nos han sorprendido con una visita muy especial: los tres acudieron a una residencia de ancianos en Esch-sur-Alzette, la segunda ciudad del país.

La emocionante visita del principito Charles de Luxemburgo a unos mayores (que te hará llorar)
Cour Grand Ducal.

Los compromisos oficiales de los 'royals' a menudo se atienen a reglas muy marcadas. Son serios, no diremos que aburridos. Pero esta ocasión iba a ser necesariamente diferente por su propia naturaleza. Como se preveía, el pequeño acaparó toda la atención. A sus dos años (cumplirá tres el próximo 10 de mayo), el niño se paseó con toda naturalidad por las instalaciones, primero en brazos de sus padres y luego, cuando cogió más confianza, por su propia cuenta.Charles (que llevaba un gorrito con su nombre bordado) hizo las delicias de los presentes con su simpatía y naturalidad, yendo de una mesa a otra, hablando o chapurreando con los ancianos, que no paraban de hacerle carantoñas como harían con sus propios nietos, que le tocaban y achuchaban... El pequeño logró sacarles una sonrisa impagable en una jornada que seguro que no olvidarán. Charles incluso se lanzó a comer una tortita de las que habían preparado.

charles de luxemburgo
Cour Grand Ducal.

El príncipe Charles es el primogénito de los príncipes herederos y nieto de los Grandes Duques Enrique y María Teresa. Su nacimiento fue todo un acontecimiento, pues llegó casi a los ocho años de contraer matrimonio sus padres (su boda se celebró el 20 de octubre de 2012), cuando se pensaba que había ciertos problemas para tener descendencia. Charles suponía la deseada continuación de la dinastía, ya que en un futuro será proclamado como monarca de Luxemburgo, después de su padre.Y la mejor parte es que dentro de poco tendrá un hermanito. La princesa Stéphanie está esperando su segundo hijo, del que por el momento se desconoce su sexo. También ella compartió esta jornada tan única con su marido y su hijo, entreteniendo a las personas mayores. Stéphanie, nacida como condesa de Lannoy, cumplirá 39 años el próximo 18 de febrero. Se encuentra estupendamente en esta recta de su embarazo y está previsto que dé a luz el próximo mes de abril.

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A la pareja se le cae la baba con su hijo Charles y en cada posado que comparten nos demuestran toda la ternura de la que son capaces. Cuando el primogénito deje de ser el 'rey de la casa' también aprenderá a compartir con su hermanito y juntos seguro que se convertirán en unos grandes compañeros de juegos.Sigue deslizando para ver todo lo que dio de sí esta visita llena de emociones.

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