El tratamiento 'efecto lifting' de Eugenia Silva es perfecto para rejuvenecer sin necesidad de agujas

El envejecimiento de la piel es un proceso inevitable y completamente natural. En primer lugar aparecen las llamadas líneas de expresión, que más tarde se convierten en arrugas y flacidez. Finalmente la dermis pierde su definición y su volumen, y surgen los surcos y pliegues. Las cremas antiedad (así como unos hábitos de vida saludables) son imprescindibles para retrasar los efectos del paso del tiempo en la piel, pero, en ocasiones, no son suficientes y no nos queda más remedio que aliarnos con la medicina estética.

Uno de los protocolos en cabina más populares ahora es la combinación de tecnologías de ultrasonidos y radiofrecuencia. El éxito de esta aparatología se debe a que no precisa de agujas ni inyecciones, y tampoco se introduce ninguna sustancia externa en el organismo. ¿Lo mejor? Sus efectos secundarios son prácticamente inexistentes. Y quizás por todos estos motivos Eugenia Silva se ha decidido a probar un tratamiento completamente innovador en cuestión de rejuvenecimiento facial. ¿Su nombre? Accent Prime.

Eugenia Silva se rinde al tratamiento ideal para las mujeres que temen a las agujas

"Este tratamiento promueve la regeneración celular para mejorar la elasticidad y la textura de la dermis. El resultado es una piel más luminosa, hidratada y uniforme, con un 'efecto lifting' y rejuvenecedor que me encanta", explica la modelo. ¿Quieres saber en qué consiste exactamente el protocolo Accent Prime? ¡Apunta!

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Básicamente este tratamiento combina (con precisión y puntería milimétrica) ultrasonidos focalizados y radiofrecuencia. La sinergia de ambas tecnologías potencia los resultados de cada una de ellas consiguiendo resultados visibles en menor tiempo.

Las ondas ultrasónicas logran efectos eficaces de remodelación facial, así como de reducción de grasa localizada presente en ocasiones en la zona del doble mentón. Por su parte, la radiofrecuencia se encarga de tensar y reafirmar los tejidos. Y no solo eso, a través del calentamiento sobre la zona tratada, se contraen las fibras de elastina y se estimula la formación de nuevo colágeno. Como resultado, se atenúan visiblemente las arrugas y las líneas de expresión, y la piel recupera su firmeza luciendo mucho más saludable, fresca y joven.

Los efectos de este tratamiento son visibles desde la primera sesión, pero se recomiendan alrededor de cuatro para notar al máximo los resultados en la piel. Lo ideal es hacer una sesión cada 15-20 días.