Pedro Ruiz nos sorprendía hace poco diciendo que podría ser presidente del Gobierno de cualquier país. Hacía tiempo que no sabíamos de él y, de repente, lanza este órdago con pinta de chiste. Según el propio cómico, se había dado cuenta de que tiene las 7 condiciones básicas para desempeñar este puesto: “Una, soy actor, finjo profesionalmente. Dos. Improviso ante cambios de panorama. Tres. Hablo seguido, y sin guion. Cuatro. Nunca sabe nadie por dónde voy a salir. Cinco. Sé poner cara de asombro, dolor o sorpresa ante acusaciones que ya me imaginaba. Seis. No tengo novia ni esposa ni marido ni familia en negocio alguno. Siete. Estoy políticamente a estrenar”, compartió, no sin inyectar a sus palabras un tono irónico muy característico de su personalidad.

Sin embargo, parece que Pedro Ruiz ha omitido una cualidad esencial en su lista: su capacidad de ejercer un pensamiento crítico. Tras la broma sobre su posible candidatura a la presidencia en redes sociales, Pedro Ruiz nos invita a adentrarnos en un espacio más íntimo y personal: su hogar. En una conversación reveladora, el actor comparte reflexiones desde la comodidad de su casa, prometiendo ofrecer una perspectiva aún más profunda sobre su visión del mundo, su carrera y cómo navega por la complejidad de mantenerse auténtico en una era dominada por la imagen y el ‘like’.

Esta entrevista exclusiva para SEMANA no solo nos acerca al hombre detrás del sarcasmo y la crítica social, sino que también promete descubrir los matices de su vida personal que raramente comparte con el público.

Así es la casa de Pedro Ruiz por dentro, el espacio donde se encuentra más a gusto

La imagen parecía de cuento. Según nos acercábamos en el coche a la parcela de su casa, divisábamos a lo lejos a Pedro Ruiz (76 años) con un arcoíris detrás. Nos habíamos citado por teléfono apenas unas horas antes ¿El motivo? Ni recibe WhatsApp, ni e-mail ni nada por el estilo. No guarda ningún número de teléfono en su antiguo móvil, pero los almacena todos en su prodigiosa cabeza. Nos pusimos en contacto con él a través de un entrañable amigo y enseguida aceptó, nos recibió y nos incluyó en su apretada agenda. No suele atender a prensa en su casa, pero con nosotros hizo una excepción.

Pedro Ruiz

Pedro Ruiz nos abre las puertas de su casa.

Gtres

Me ha pedido que no lo trate de usted, pero me resulta casi imposible con toda la trayectoria que tiene a sus espaldas.

Yo soy el hijo de mi padre, que era chófer particular, mi madre vendía bacalao y soy un chico que, como los demás, me moriré como el resto. No hay que darse tanta importancia.

Pero estará de acuerdo conmigo que tiene una gran trayectoria.

No me quejo porque la verdad es que yo he escrito el guion de mi vida. A mí no me lo ha escrito nadie, me he equivocado, he acertado, me he levantado… Pero yo nunca he hecho nada que no quisiera hacer. Y, por favor, tutéeme.

Esta casa irradia paz y serenidad.

Procuro tenerla, no digo que la tenga, pero en el momento en que le quitas importancia a la apariencia, que yo se la sigo dando porque soy una persona vanidosa, como todos los artistas, te das cuenta de que tú mismo no eres para tanto y entonces es cuando empiezas a calmarte.

La piscina de Pedro Ruiz

"Ahora que mi madre ya no está y mi hermano se ha ido a vivir a La Rioja, vivo en esta casa solo’, nos cuenta Pedro.

Foto: Joan Crisol

¿Y en qué momento te diste cuenta de que no eras para tanto?

Hace mucho tiempo. Yo, con 14 años escribí una obra que nunca estrené que se llamaba Si lo sé, no nazco. Así que, imagínate. Vas pasando y vas conociendo ambientes y cosas y primero te impresionan mucho, luego te cansan y finalmente las relativizas, empezando por ti mismo. Vas a fiestas que parecen muy importantes y no lo son. Vas a entregas de premios y no lo son y, al final, te quedas con que hay tres cosas en la vida, que son la serenidad, el criterio y los afectos.

¿Llevas mucho tiempo viviendo aquí?

Esta casa tiene 39 años. Yo tenía casa en Barcelona y casa aquí, en Madrid. La de Barcelona la he vendido hace tres años. Ahora que mi madre ya no está y mi hermano se ha ido a vivir a La Rioja, vivo aquí solo.

¿Es verdad que te tiras todas las mañanas a tu piscina, aunque esté helada?

Tengo 76 años, el hombre más rico del mundo de mi edad pagaría por mi salud y yo no se la vendo. Me tiro todos los días independientemente de la temperatura.

El Salón de Pedro Ruiz

Su salón está decorado con infinidad de fotos y reconocimientos de su larga trayectoria.

Has creado escuela en el mundo de la televisión y has entrevistado a los más grandes, pero, sin embargo, no te consideras periodista.

Yo no soy periodista. Yo nunca he sido periodista, yo soy artista y cuando charlo con gente, soy un artista que conversa, pero nunca he tenido vocación de periodista. Soy un hombre del teatro y, si no me has visto en el teatro, no me conoces.

Uno de tus programas con más éxito y emblemáticos fue Estudio Estadio.

Yo inventé Estudio Estadio, inventé el título y eso lo hice con 24 años. ¿Y por qué hacía deporte? Porque en tiempos de Franco era en lo único en lo que podías decir que el árbitro había estado mal. Era un pequeño territorio de libertad. Cuando pasó el tiempo, al cabo de un año de hacer ese programa, me cansé y empecé en el teatro porque entendí que la popularidad que tenía por la calle en aquel momento era excesiva para la tontería que hacía. Y esa lección hay que aprenderla pronto.

¿Ese fue el motivo?

Lo dejé porque Televisión Española me dijo que no podía hacer teatro y televisión a la vez, que no era digno, que eso era el mundo de la farándula y que eligiera, y entonces elegí el teatro. Y aquí viene la lección. Los once meses que hice Estudio Estadio fue visto por veintitantos millones de personas. Pues la Navidad de ese año, yo no podía entrar en casa de jamones, de turrones, de champán, de regalos que me mandaban, y fue dejar de hacer ese programa y, al año siguiente, solamente llegó una botella de vino que envió el Real Club Deportivo Español.

Pedro Ruiz cantante

"He tratado de hacer un programa amable, elegante, de autor, trabajando de una manera que no se trabaja ya. Sin pinganillo", dice sobre su nuevo espacio de TVE, Nada del otro mundo.

Foto: Joan Crisol

Tienes una memoria de elefante.

Yo ejercito mucho la memoria. No sé si has visto mi teléfono, pero siempre presumo de él porque no tengo grabado ningún número. No tengo ningún contacto de nadie ni lo quiero tener. Yo me sé 200 teléfonos de memoria. No quiero regalarle mi memoria a un trasto. Os han convertido a todos en esclavos digitales y ya no podréis salir de esa dictadura.

En esta casa hay muchas fotos de tu madre. ¿Ha sido la mujer de tu vida?

Ha sido la madre de mi vida. Tengo la suerte de haber tenido una madre con mucho coraje y hondura. A ella le pasó una cosa concreta y la cuidé. Hay gente que no tiene medios y también lo hace y tiene más mérito porque es muy malo querer y no poder, pero es peor poder y no querer. Si tú teniendo medios, coges a la persona de tu vida y la trasladas para que la cuiden otros, estás demostrando cómo eres. Y esto es bastante sencillo... Alguien que no va a ver a su madre a su casa o a la residencia (si no tiene más remedio que tenerla allí por lo que sea) te está diciendo lo que va a hacer contigo como socio, como empleado y como amigo. No le des más vueltas.

Los premios de Pedro Ruiz

“Tengo 76 años, el hombre más rico del mundo pagaría por mi salud y yo no se la vendo”, nos confiesa Pedro.

Foto: Joan Crisol

¿Y cuáles son los valores que te transmitió?

Yo nunca he oído hablar mal de nadie ni a mi padre ni a mi madre. Mi madre era bondadosa. No es que fueran personas brillantísimas en el sentido de que mi padre tenía carrera de chófer particular y mi madre tenía una tienda de bacalao y de verdura y trabajaba 20 horas al día, pero tenían coraje.

Has vuelto a TVE como presentador.

He tratado de hacer un programa amable, elegante, de autor. He trabajado de una manera que no se trabaja ya. Sin pinganillo. A mí no me pone un pinganillo ni la Guardia Civil. O sea, la técnica me sigue a mí, yo no sigo la técnica.

¿Te pensante mucho el aceptar el proyecto?

En estos años he presentado proyectos a Televisión Española y hasta ahora no me habían hecho caso. Sin embargo, este equipo me ha escuchado y decidimos hacer este especial para probar. Pero, de momento, es un programa. Si funciona, veremos lo que hacemos.