Los Reyes Felipe y Letizia hoy han reaparecido juntos en la localidad leonesa de Armunia con un bonito propósito: entregar el Premio Princesa de Girona Escuela del Año 2022  al colegio Gumersindo Azcárate. Todo pintaba muy bien hasta que han amanecido con el Rey Juan Carlos en la portada de una revista celebrando su 86 cumpleaños. El evento tuvo lugar en Abu Dabi el pasado 5 de enero y el monarca emérito quiso festejarlo por todo lo alto rodeado de familiares y amigos. Con la salvedad de que allí faltaban personas fundamentales de su entorno: su esposa, la Reina Sofía, y su hijo y heredero, el Rey Felipe. Por no hablar de la Reina Letizia y sus nietas Leonor y Sofía.

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Robert Smith.

Estas ausencias resuenan clamorosas en un profuso reportaje publicado en Hola, en el que aparece Don Juan Carlos feliz y sonriente, cortando con un sable su tarta de aniversario, que para más señas va cubierta con un escudo de la Corona, mientras sus hijas, las Infantas Elena y Cristina, y algunos de sus nietos, le cantan el Cumpleaños Feliz e inmortalizan el momento con sus móviles. Una estampa que podría ser totalmente normal si no fuera porque se trata de quien se trata. Es innegable que hoy todo el mundo hace una lectura con segundas intenciones.

No hay nada de extraño en celebrar llegar a tan avanzada edad, pero otra cosa es encontrártela a todo color en las páginas de una revista, justo en el momento en el que estamos y al punto al que hemos llegado. La Casa Real no se pronuncia públicamente sobre estos asuntos de índole privada, pero mucho nos tememos que este despliegue del emérito no ha sentado nada bien. Así al menos lo indican algunas voces: hay un auténtico malestar.

Los Reyes Felipe y Letizia, capeando el temporal tras las fotos del emérito

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La Reina Letizia, con gesto pensativ0 (Robert Smith).

Los Reyes Felipe y Letizia hoy han hecho de tripas corazón. Qué remedio. Han cumplido a la perfección con su cometido, han visitado el mencionado colegio y han charlado con muchos de los niños que estudian allí. Se les premia porque son un ejemplo de convivencia, pues acoge a 130 niños de 12 nacionalidades diferentes. Convivencia, decimos. En lo que respecta a la Familia Real y la familia del Rey parece que su coexistencia se sostiene en el alambre de unos años a esta parte. Y estas imágenes de fiesta en Abu Dabi no hacen sino que se tambalee su frágil equilibrio.

El 60 cumpleaños de la Infanta Elena, ¿un espejismo?

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Los Reyes, durante su visita al huerto del colegio bajo la lluvia (Casa de S.M. el Rey).

Cuando todo parecía 'solucionado' (al menos de cara a la galería) tras el animado 60 cumpleaños de la Infanta Elena en un restaurante de Madrid (ahí sí que no faltó nadie), estas fotografías han caído como un jarro de agua fría. Entonces, ¿aquello qué fue? ¿Una reconciliación familiar fingida? Aquel cónclave de los Borbón fue un estupendo golpe de efecto para que se dejase de hablar de distanciamiento y frialdad. Pero ahora volvemos al punto de partida.

El Rey Felipe parecía especialmente serio en algunos momentos durante esta visita al colegio. No ha habido palabras ni comentarios al respecto, por supuesto, pero algunos gestos lo decían todo. El soberano había desayunado viendo a su padre, sus hermanas y casi todos sus sobrinos en un momento de celebración familiar que conlleva mucho más que eso. Era la escenificación gráfica de las dos partes de la familia Borbón, por un lado la fiesta y por otro la responsabilidad. El monarca se empeña en trabajar duro por la transparencia de la institución y por dejar un legado limpio a su heredera, la Princesa Leonor, después de años de escándalos, pero estos otros gestos no hacen sino poner más piedras en el camino.