Tamara Falcó tomó la decisión de comprarse un ático a finales de 2020. Sin embargo, antes de entrar a vivir a su nuevo hogar, la marquesa de Griñón decidía someter su vivienda a una reforma de lujo para adaptarlo a sus comodidades. Y parece que ya está listo para que tanto ella como su marido, Íñigo Onieva, hagan la mudanza e inicien una nueva etapa en sus vidas. Justo cuando atraviesan uno de los momentos más increíbles en su relación.
Pero bien, antes de que lleven todos sus enseres personales, Tamara Falcó e Íñigo Onieva han querido dejar unas cosas listas porque es algo que les preocupa. Y tiene que ver con su privacidad e intimidad. El ático cuenta con una espectacular terraza que da al exterior, pero el matrimonio es consciente de que son dos personas muy reconocidas y de que su casa en ciertas ocasiones va a estar repleta de cámaras. Eso les ha llevado a tomar la decisión de proteger su intimidad ante los más curiosos.
Tamara Falcó e Íñigo Onieva quieren proteger su intimidad en su nueva hogar
Para ello, Tamara e Íñigo han contratado los servicios de una empresa de jardinería para que les coloque algunas plantas en la barandilla de cristal que tienen en la terraza. Conscientes de que no tapa nada de lo que pueda pasar en esta zona de la casa, la pareja ha optado por colocar grandes maceteros con árboles para así evitar que pueda verse lo que hacen en la intimidad de su hogar.
La empresa de jardinería ha necesitado la ayuda de un camión con grúa para poder hacer llegar estos maceteros de grandes dimensiones a la terraza del matrimonio. Hay que recordar que el piso que adquirió Tamara Falcó es el ático, por lo que se encuentra en la planta sexta de su bloque. La dimensión de los maceteros hace inviable llevarlos a la casa por la escalera o el ascensor, por lo que se ha necesitado un camión con grúa para subirlos desde fuera.
Una empresa de jardinería coloca maceteros grandes en la terraza de la casa de Tamara Falcó e Íñigo Onieva
Vídeo: EUROPA PRESS.
Vídeo: EUROPA PRESS.
Por ahora no se le ha visto ni a Tamara ni a Íñigo en las inmediaciones de su casa mientras los operarios estaban haciendo estos trabajos. Lo cierto es que han empezado a subir los maceteros a la terraza desde primera hora de la mañana de este martes. Todo hace entender, con este paso, que el matrimonio podría estar barajando ya la posibilidad de entrar a vivir. Más pronto que tarde. Pero sí que es cierto que querrán tener todo listo para que cuando den el paso, esté todo listo.
Todo hace indicar que el matrimonio dará el paso de entrar a vivir el próximo mes de noviembre. Aunque la entrega de llaves se produjo hace más de un año, la hija de Isabel Preysler prefirió hacerle una reforma. "A Tamara se le dio las llaves en el mes de junio de 2022", comentaron a esta revista.
Una impresionante casa con increíbles ventanales
Cuatro habitaciones distribuidas en 186 metros cuadrados, una increíble terraza con vistas y primeras calidades son solo algunos de los detalles de esta casa tan especial al que la hija de Isabel Preysler ha querido darle su toque. Para ello ha contado con decoradoras de confianza como son Berta Jorde y Pilar Jiménez, fundadoras de Drömmeri Interiorismo y quienes han reformado, por ejemplo, su vestidor en la casa que su madre tiene en el mismo barrio que ella, Puerta de Hierro. Repleta de ventanales que dejan ver unas preciosas vistas panorámicas de la capital, lo cierto es que Tamara está acostumbrada a grandes espacios. Con su traslado no renunciará a ello.
Aunque su nuevo domicilio será un auténtico oasis, tendrá que convivir con otros vecinos, de hecho, son 87 propietarios en su lujosa urbanización. Allí tanto ella como el resto podrán disfrutar si lo desean de piscina, spa, gimnasio e incluso zona social gourmet, comodidades que multiplicarán los gastos y que harán mucho más apetecible vivir en un lugar así.