Ni Kate Middleton (42 años) ni su familia imaginaron el vendaval que desataría su operación abdominal. Ni en sus peores sueños se planteó que durante dos meses no se hablaría de otra cosa, que sería la absoluta protagonista de la prensa extranjera. Mucho menos la bomba que estaba a punto de estallarle en la cara y es que un trabajador del hospital en el que se intervino ha roto todas las barreras de seguridad. Una 'pillada' por la que se ha iniciado una investigación y que, por supuesto, ha llegado a oídos de la princesa de Gales.
Tras la publicación de múltiples teorías acerca de su salud y de que eligiera reaparecer en una tienda agrícola cercana a su casa, se publica que el hospital donde se operó está en problemas. Su plantilla está siendo investigada por tratar de acceder al historial de Kate Middleton, un hecho sobre el que The London Clinic se ha pronunciado.
Aunque no quieren valorar el hecho de que uno de sus trabajadores haya roto las normas de confidencialidad, sí que aseguran que todos sus pacientes son importantes para ellos. Por eso no consentirán que algo así se pueda repetir en el futuro. Se caracterizan por cuidar al máximo la intimidad de sus clientes y esto pone en sobre aviso a futuros pacientes, siendo muchos famosos los que hasta ahora recurrían a sus servicios.
El hospital de Kate Middleton: "Es una violación de seguridad importante"
Un portavoz de la clínica ha explicado qué cuidan y qué seguirán cuidando, a pesar de lo sucedido. "Creemos firmemente que todos nuestros pacientes, sin importar su estado, merecen total privacidad y confidencialidad con respecto a su información médica", dice en 'The Mirror', tabloide británico que ha avanzado el escándalo royal. El mismo medio que ha tenido la oportunidad de hablar con alguien cercano a esta clínica en la que la esposa del príncipe Guillermo fue operada el pasado 16 de enero.
"Esta es una violación de seguridad importante y dañina para el hospital, dada su reputación intachable de tratar a miembros de la Familia Real. Los jefes del hospital se pusieron en contacto con el Palacio de Kensington inmediatamente después de que se les informara sobre el incidente. Todo el personal médico está conmocionado y angustiado por las acusaciones. Están heridos porque un compañero haya podido ser el responsable de tal abuso de confianza y ética", explican en el diario.
No dudan ni un momento que llegarán al quid de la cuestión y que el culpable será despedido. Unas consecuencias que se espera y que servirán para aclarar que han cortado con el problema de raíz. Este es precisamente el mensaje que quieren transmitir, ya que son conscientes de que se ha hecho público. Por ese motivo han querido revelarle al Palacio de Kensington lo sucedido y recordarles que harán todo lo posible por resolver este asunto.
Aunque la identidad del trabajador es una incógnita, lo que sí está confirmado es que la persona en cuestión ha cometido un delito. La Oficina del Comisionado de Información ha recibido un informe en el que se revela la infracción, el cual están evaluando antes de llegar a una conclusión. Un delito penal teniendo en cuenta que no existía consentimiento por parte de Kate Middleton.
La otra polémica de Kate Middleton que tanto ruido ha hecho en Reino Unido
Desde el Palacio de Kensington han corroborado que la mujer que aparece en las últimas fotos de Kate es ella y no ninguna de las dobles que circulaban por redes sociales. Aunque está más delgada y eso es evidente, Kate sigue guardando sus característicos rasgos. Un rostro que ha sido analizado al detalle tras ser vista en una de sus tiendas favoritas y cuya imagen fue tomada por una persona anónima que se encontraba en las inmediaciones. "Estaba relajada y feliz. Este es un vídeo que muestra claramente a Kate y a Guillermo. Los vi con mis propios ojos. Era una situación completamente relajada", asegura Nelson, el testigo que fotografió a Middleton en The Sun.
"Tenía unos 40 minutos libres y decidí comprar algún producto. Entré en la tienda y al principio noté sus figuras, estaban de pie cerca del pan. Entonces vi a Kate girar ligeramente la cabeza y pensé: 'Oh, la conozco'. Fueron a la sección de carnes y yo estaba detrás de ellos. Estaban hablando con el personal y riéndose. No podía oír lo que decían, pero el personal parecía estar viviendo un momento agradable. Cuando fui a pagar mis productos, la chica del mostrador estaba tan sorprendida que apenas respiraba", comenta él en su primera entrevista.
La princesa de Gales es de nuevo noticia, esta vez por la brecha de seguridad que tuvo lugar durante su ingreso hospitalario. ¿Se aclarará lo sucedido? Solo el tiempo lo dirá.